El pasado viernes, los equipos del Grupo Ariane, el Centro Aeroespacial Alemán (DLR) y la Agencia Espacial Europea (ESA) completaron con éxito otra prueba de fuego caliente en el banco de pruebas dedicado a la etapa superior del Nuevo lanzador Ariane 6, en Lampoldshausen (Alemania).
Vinci, el motor de la etapa superior de Ariane 6 alimentado por hidrógeno líquido y oxígeno, se puede detener y reiniciar varias veces para colocar satélites en diferentes órbitas y luego sacar de órbita la etapa superior, para que no quede atrás como desechos peligrosos en el espacio. La APU (Unidad de potencia auxiliar) hace posible que Vinci se reinicie en el espacio manteniendo una presión adecuada en los tanques de combustible y evitando burbujas en las líneas de combustible. La APU utiliza pequeñas cantidades de hidrógeno líquido y oxígeno de los tanques principales, reemplazando un sistema que dependía de grandes cantidades de helio en tanques.
Está prevista una última prueba de fuego caliente antes de la calificación final de la etapa superior del Ariane 6, con el objetivo de probar su funcionamiento para diferentes tipos de misiones, así como en condiciones degradadas.
El director de Transporte Espacial de la ESA, Toni Tolker-Nielsen, agradeció a los socios de DLR y al contratista principal de Ariane 6, ArianeGroup, que están realizando las pruebas en Lampoldshausen. “Ariane 6 representa un aumento dramático en nuestra capacidad de lanzamiento, y la etapa superior con su motor Vinci reiniciable ser transformador. Los resultados de estas pruebas nos dan una gran confianza en la flexibilidad de este sistema de lanzamiento para satisfacer todos los requisitos de la misión. Junto con nuestros socios estamos logrando avances significativos y espero con ansias las próximas etapas de nuestro viaje con el Ariane 6″.
Las pruebas en Lampoldshausen se llevan a cabo en paralelo con las pruebas en la plataforma de lanzamiento del puerto espacial europeo en la Guayana Francesa. Allí, el motor de etapa central inferior del Ariane 6 (Vulcain 2.1, adaptado del Vulcain 2 del Ariane 5) se está probando para simular un lanzamiento real. Las pruebas en la plataforma de lanzamiento incluyen un modelo de prueba del Ariane 6, de 60 metros de altura. Este cohete no está diseñado para volar, pero es esencialmente idéntico a un modelo de vuelo, salvo sus propulsores de combustible sólido, que son maquetas inertes. Estas pruebas garantizarán que el cohete y la infraestructura terrestre funcionen juntos como un sistema completo.
Ariane 6 es un diseño completamente nuevo, creado para suceder al Ariane 5 como sistema de lanzamiento de carga pesada de Europa. Esta capacidad autónoma para alcanzar la órbita terrestre y el espacio profundo es la base de la visión europea de la navegación espacial, la observación de la Tierra y los servicios científicos y de seguridad. Esta visión se hace realidad gracias a la dedicación sostenida de miles de personas con talento que trabajan en los 22 Estados miembros de la ESA y que se autodenominan #SpaceTeamEurope.
La ESA posee y gestiona el programa Ariane 6 y define sus objetivos de rendimiento; ArianeGroup es el contratista principal y el operador del lanzamiento es Arianespace. La agencia espacial francesa, CNES, opera el puerto espacial europeo en la Guayana Francesa, hogar de los lanzadores Ariane desde su primer despegue en 1979.