La Comisión Europea ha aprobado los planes de Rumanía de otorgar un préstamo de 36,7 millones de euros al operador Tarom. La medida contribuirá a garantizar la continuación ordenada de los servicios de transporte aéreo, en particular en las numerosas rutas en las que Tarom es único proveedor y evitará perjuicios para los pasajeros, sin distorsionar la competencia en el mercado único.
La aerolínea se enfrenta a una grave escasez de liquidez, debido al fuerte aumento en los costes operativos generados por su antigua flota en los últimos años. En ausencia de la ayuda, Tarom ya no podrá cumplir con sus obligaciones de pago mientras mantiene las operaciones en funcionamiento.
Las Directrices de la Comisión sobre ayudas de salvamento y reestructuración permiten a los Estados miembros apoyar a las empresas en dificultades, siempre que, en particular, las medidas de ayuda pública sean limitadas en tiempo y alcance y contribuyan a un objetivo de interés común. La ayuda de rescate se puede otorgar por un máximo de seis meses para darle tiempo a la empresa para encontrar soluciones en una situación de emergencia.
En el presente caso, la Comisión ha tenido en cuenta los siguientes elementos: el préstamo cubrirá solo las necesidades de liquidez demostradas de Tarom durante los próximos seis meses y Rumania realizará un estricto monitoreo de cómo se utilizan los fondos; y Rumania se comprometió a garantizar que, después de seis meses, el préstamo se reembolsará en su totalidad, o Tarom presentará un plan de liquidación o llevará a cabo una reestructuración integral para que sea viable a largo plazo. Dicha posible reestructuración estaría sujeta a la evaluación y aprobación de la Comisión.