El XB-1 completó con éxito su cuarto vuelo de prueba y el más rápido el pasado sábado. El XB-1 alcanzó una velocidad máxima de Mach 0,617, más de la mitad del camino para romper la barrera del sonido a Mach 1. Apenas ocho días después de su tercer vuelo de prueba, el XB-1 completó con éxito su cuarto vuelo de prueba. Durante este vuelo, el XB-1 alcanzó las velocidades más altas hasta el momento a Mach 0,617, o 313 nudos de velocidad aerodinámica indicada, más de la mitad del camino para romper la barrera del sonido a Mach 1.
Este vuelo marca el primer uso del sistema de excitación de vibraciones (FES) en vuelo. El FES es un dispositivo de vibración que podemos activar para alcanzar deliberadamente modos de vibración estructural antes de que los encontremos de forma natural en vuelo.
“Además de comprobar las cualidades básicas de manejo del avión a distintas velocidades entre 225 y 300 nudos, el equipo llevó al XB-1 hasta 2,78 g (o fuerza g), utilizando una técnica de prueba de vuelo llamada viraje ascendente para aplicar fuerzas g elevadas al avión. Esta es la máxima que pretendemos ver durante el programa de pruebas de vuelo del XB-1. Cuando lleguemos al vuelo supersónico, el XB-1 tendrá que realizar un viraje a 2 g para alinearse para el vuelo supersónico; el equipo está probando el avión con un margen adicional para aumentar la seguridad”, indicó la empresa.
El tren de aterrizaje se retrajo a una velocidad máxima de 225 nudos, completando así esta parte de la prueba del sistema. Durante los vuelos de prueba futuros, el equipo retraerá el tren de aterrizaje inmediatamente después del despegue.
El vuelo alcanzó una altitud máxima de 5.000 metros, con un tiempo total de vuelo de 48 minutos. El XB-1 fue pilotado por el piloto de pruebas jefe de Boom, Tristan «Geppetto» Brandenburg, quien realizó el segundo y tercer vuelo del XB-1 y también pilotará el primer vuelo supersónico del avión.