“He convertido en delito penal que cualquier avión ruso ingrese al espacio aéreo del Reino Unido y ahora HMG puede detener estos aviones. Asfixiaremos la capacidad de los compinches de Putin para seguir viviendo con normalidad mientras mueren miles de personas inocentes”, ha escrito en su cuenta de Twitter el secretario de Transporte británico, Hon Grant Shapps.
También publicó una carta, enviada a todos los aeropuertos y aeródromos del Reino Unido, en la que describía las nuevas medidas, incluida la concesión de poderes de control del tráfico aéreo para “dar instrucciones a un piloto u operador de una aeronave rusa para que no ingrese al espacio aéreo del Reino Unido o lo abandone por un determinada ruta”.
“El sector de la aviación es fundamental para la conectividad y el comercio internacional y debemos desempeñar nuestro papel para restringir los intereses económicos de Rusia y hacer que el gobierno ruso rinda cuentas. En estas circunstancias, el Departamento de Transporte no considera apropiado que los aviones rusos ingresen al espacio aéreo o aterricen en los aeropuertos del Reino Unido”.
Poco después de hacerse públicas estos decisiones, la secretaria británica de Relaciones Exteriores, Liz Truss, ha anunciado un nuevo conjunto de sanciones a la aviación que otorga al gobierno del Reino Unido nuevos poderes para detener cualquier aeronave rusa en el Reino Unido. “También hemos reforzado la prohibición actual de sobrevuelo y aterrizaje de aeronaves rusas, estableciendo hoy una nueva legislación para convertir en delito penal que cualquier aeronave rusa vuele o aterrice en el Reino Unido”.
La prohibición incluye a cualquier aeronave de propiedad, operada o fletada por cualquier persona relacionada con Rusia o personas o entidades designadas, e incluirá el poder de detener cualquier aeronave propiedad de personas relacionadas con Rusia.
Los nuevos poderes también permitirán que el Gobierno elimine las aeronaves pertenecientes a personas y entidades rusas consignadas en el registro de aeronaves del Reino Unido.
Las medidas comerciales adicionales, también introducidas hoy, evitarán las exportaciones del Reino Unido de artículos y tecnología relacionados con la aviación o el espacio a Rusia, incluidos los servicios relacionados, como los servicios de seguros y reaseguros. Esto significa que se retira la cobertura de las pólizas existentes y las aseguradoras y reaseguradoras del Reino Unido no podrán pagar las reclamaciones con respecto a las pólizas existentes en estos sectores.
Estas nuevas medidas reforzarán aún más la creciente presión económica sobre Rusia y garantizarán que el Reino Unido cumpla con las sanciones impuestas por nuestros aliados.