El grupo francés Onera está realizando investigaciones sobre aerodinámica en una atmósfera turbulenta y en ráfagas, incluso cuando se vuela a baja altitud,con el objetivo de desarrollar modelos, validar simulaciones numéricas utilizadas durante la etapa de diseño y mejorar los simuladores de vuelo.
Estas investigaciones se basan en pruebas de superficie del suelo en túneles de viento, así como pruebas de vuelo libre en modelos de escala reducida. Este último consiste en volar un modelo a escala de vuelo libre a través de ráfagas laterales cuyas características están calibradas. El comportamiento del vehículo, tanto la trayectoria como los ángulos, se miden durante este vuelo.
Esta prueba se ha aplicado a un modelo de aeronave de control remoto de cinco metros de largo, volado en el laboratorio de vuelo libre de Onera en Lille. Gracias a sus grandes dimensiones (90x20x20 metros cúbicos), este laboratorio construido originalmente para pruebas en modelos de aviones catapultados, es ideal para este tipo de experimentos.
Un túnel de viento de circuito abierto ubicado en el centro del laboratorio permite generar un viento lateral localmente: se simula un área de atmósfera perturbada, perfectamente conocida y con un perfil de velocidad ajustable en forma e intensidad. Esta configuración se completa con un sistema de video-trayectografía.
Este trabajo de I + T se realiza en colaboración con Flying Whales Company, para el desarrollo de una aeronave de gran capacidad para el transporte de cargas pesadas.