Lunar Outpost, empresa especializada en movilidad lunar, robótica espacial y recursos espaciales, ha firmado un acuerdo con SpaceX para transportar su Lunar Terrain Vehicle (LTV) a la Luna utilizando el cohete Starship. Este hito marca un avance clave hacia la creación de infraestructuras sostenibles en la superficie lunar y el soporte a futuras misiones Artemisa de la Nasa.
El anuncio llega tras importantes hitos técnicos alcanzados por ambas compañías. Lunar Outpost completó recientemente pruebas de su prototipo funcional en el Centro Espacial Johnson de la Nasa, después de superar con éxito una revisión de requisitos en septiembre. Por su parte, SpaceX ha demostrado grandes avances en el desarrollo del Starship, incluido el aterrizaje exitoso del cohete Super Heavy en la base de Starbase, Texas, utilizando el sistema Mechazilla.
Justin Cyrus, fundador y CEO de Lunar Outpost, subrayó la importancia de esta colaboración explicando que “el LTV de Lunar Outpost está diseñado para ser el pilar de las operaciones en la superficie lunar, facilitando la ciencia, la exploración y la construcción de infraestructuras interplanetarias. Gracias a SpaceX, estamos avanzando hacia una presencia humana sostenible en el espacio. Este contrato es crucial para acelerar nuestra misión.”
El Lunar Outpost Eagle, el vehículo lunar en desarrollo como parte del contrato de Servicios de Vehículos de Terreno Lunar (LTVS) de la Nasa, promete revolucionar la movilidad en la superficie de la Luna. Entre sus características principales se encuentran: el soporte a misiones tripuladas y no tripuladas: equipamiento para navegación autónoma avanzada y opciones de carga reconfigurables; la duración prolongada de misión: capacidad para operar durante las duras noches lunares, extendiendo su vida útil de días a años; y los colaboradores de primera línea: su desarrollo está liderado por el equipo Lunar Dawn, en colaboración con empresas como Leidos, MDA Space, Goodyear y General Motors.
Este diseño innovador no solo busca maximizar las misiones científicas y comerciales, sino también facilitar la utilización de recursos espaciales, un paso clave hacia la autonomía lunar.
La capacidad del Starship para transportar grandes cargas a la Luna posiciona a SpaceX como un socio estratégico ideal para Lunar Outpost. Esta colaboración no solo promete revolucionar las operaciones lunares, sino también establecer la infraestructura necesaria para una exploración interplanetaria sostenible. Con el Lunar Outpost Eagle a bordo del Starship, el panorama de la exploración lunar está preparado para una transformación significativa, marcando el inicio de una nueva era en la movilidad y las operaciones en la superficie lunar.