Los satélites de observación de la Tierra, son una herramienta fundamental para monitorizar las causas y efectos del cambio climático, según el informe de evaluación del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), publicado el mes pasado y que presenta la evidencia acumulada de la crisis climática. Dicho informe reconoce directamente la contribución de la Iniciativa de Cambio Climático de la ESA, un programa de investigación que se basa en observaciones de múltiples misiones satelitales.
Se trata del IPCC más sólido y significativo hasta la fecha, incorpora avances en observaciones climáticas, métodos de análisis y modelado, y será un factor clave para las negociaciones y la toma de decisiones sobre el clima.
Extraído de 14.000 publicaciones científicas, el informe concluye que ``es inequívoco que la influencia humana ha calentado la atmósfera, el océano y la tierra » y advierte que los cambios en el estado de muchas partes del sistema climático” no tienen precedentes durante muchos siglos para muchos miles de años”.
El dióxido de carbono se encuentra ahora en su nivel más alto en al menos dos millones de años y cada tonelada se suma al calentamiento global. Esto está provocando cambios rápidos y generalizados en la atmósfera, el océano, la criosfera y la biosfera.
En muchos capítulos, el informe destaca la valiosa contribución que brindan los satélites para rastrear el cambio y mejorar los modelos para la predicción del clima. Los registros de datos de observación nuevos y mejorados, que son más largos desde el informe anterior del IPCC en 2013, respaldan una mayor confianza en las evaluaciones de atribución climática.
«El último informe del IPCC demuestra claramente el valor de los programas de la ESA a la hora de proporcionar la base de pruebas para el seguimiento y la comprensión del cambio climático». dijo Josef Aschbacher, director general de la ESA. «Estos hechos concretos también son muy apreciados por los responsables políticos en Europa y en todo el mundo».
El informe reconoce explícitamente la Iniciativa de Cambio Climático (CCI) de la ESA, que ayuda a los equipos científicos a crear conjuntos de datos a largo plazo que abarcan hasta cuatro décadas para aspectos clave del clima, conocidos como Variables Climáticas Esenciales.
Estas variables sustentan los ‘indicadores principales’ para la monitorización del clima. Así, 15 científicos del programa CCI de la ESA trabajaron como autores colaboradores del informe, y cinco de ellos asumieron funciones de autor principal y coordinador.