El pasado viernes entró en operación la nueva antena DSS-56 construida por el INTA para el Complejo de Comunicaciones del Espacio Profundo de la Nasa en Robledo de Chavela, en la sierra madrileña, destinada a la comunicación con misiones robóticas de exploración del Sistema Solar.
La nueva antena, de 34 metros de diámetro, permite la transmisión y recepción de señales en las bandas S y X (2 y 8 Ghz), además de incorporar capacidades de recepción en las bandas K y Ka (26 y 32 Ghz). Dichas capacidades abren nuevas posibilidades que se antojan esenciales para las futuras misiones tripuladas a la Luna y a Marte.
Esta antena, así como la DSS-53 que se incorporará próximamente, son resultado de la prórroga de la enmienda del Acuerdo de Cooperación Científica entre el Reino de España y los Estados Unidos de América suscrito en enero de 2003.
El viernes por la tarde se celebró una reunión virtual por videoconferencia como acto oficial de inauguración de la nueva antena. En la reunión participaron el director general del INTA, teniente general José María Salom; el director del Complejo de Robledo, general Moisés Fernández Álvaro; junto con responsables de la Nasa y del Jet Propulsión Laboratory (JPL).
Los participantes en el acto hablaron de la histórica colaboración entre el INTA y la Nasa, del papel del Complejo de Robledo en las misiones espaciales desde mediados de los años 60 y de las perspectivas de la vuelta del hombre a la Luna.