La presencia de un dron en las cercanías del aeropuerto madrileño de Barajas obligó en la tarde del miércoles a la detención de las operaciones durante media hora y el desvío de 21 aviones, según indicaron en la cuenta Controladores aéreos de la red social X.
La suspensión se produjo poco después de las siete de la tarde y la reanudación de las operaciones tuvo lugar media hora más tarde, tras confirmar la Guardia Civil la desaparición del dron.
Aena advierte que “el uso de drones no autorizados ni adecuadamente coordinados en el entorno de las instalaciones aeroportuarias supone un gravísimo riesgo para la operación de las aeronaves”. Y recuerda que la operación de drones no está permitida en los ocho kilómetros alrededor de los aeropuertos. El uso irresponsable del dron en el entorno aeroportuario puede costar vidas y multas que pueden alcanzar los 225.000 euros.