“Con un 72% menos respecto a enero de 2019, la demanda mundial de pasajeros supone una gran preocupación. Es incluso peor que el -69% del pasado mes de diciembre”, ha dicho Alexandre de Juniac, CEO de la IATA, durante su conferencia de prensa de este martes.
El lanzamiento de la vacuna y el aumento de la capacidad de prueba, especialmente a medida que los gobiernos muestran un interés renovado en las pruebas rápidas de antígenos, es una buena noticia. Pero hasta que los gobiernos alivien las restricciones de viaje, es poco probable que se produzca una mejora significativa, añadió De Juniac.
“Seguimos centrándonos en prepararnos para cuando los gobiernos puedan aliviar las restricciones. Como saben, hemos pedido a los gobiernos que compartan sus planes y puntos de referencia para la reapertura. Esas discusiones están en curso”, señaló el CEO de IATA.
Comprender los planes de los gobiernos es importante porque reiniciar una aerolínea no es como encender un interruptor. Las aerolíneas necesitan preparar a su tripulación y aviones. Después de un año de bloqueos, esto requiere controles y coordinación. Además de eso, las aerolíneas necesitarán tiempo para comercializar los servicios potenciales para que el reinicio de las operaciones tenga algunos pasajeros, según indicó Alexandre de Juniac.
“Entendemos cuántas personas y empleos cuentan con nosotros para reiniciar las operaciones tan pronto como los gobiernos lo permitan. Por eso queremos estar listos desde el primer día. Una parte importante de nuestros preparativos es ‘IATA Travel Pass’. Esto ayudará a los pasajeros y las aerolíneas a administrar las credenciales de salud de los viajeros”, explica el CEO.
Pues si os pensáis que con el ridículo y marginador pasaporte sanitario vais a arreglar esto, os equivocáis.
Si queréis tener los mismos pasajeros que antes, tendrá que volver a ser todo como antes, y el pasaporte sanitario os dará pan para hoy y hambre para mañana.