“Después de completar la revisión de seguridad requerida y exhaustiva, la Federal Aviation Administration (FAA) de EEUU determinó que el vehículo Starship de SpaceX puede regresar a las operaciones de vuelo mientras la investigación sobre el accidente del vuelo 7 de Starship del 16 de enero sigue abierta. La FAA está supervisando la investigación dirigida por SpaceX”, declaro el pasado viernes la agencia reguladora.
La FAA emitió una modificación de licencia que autoriza el lanzamiento este lunes de la octava prueba de vuelo de Starship de SpaceX. La FAA determinó que SpaceX cumplió con todos los requisitos de seguridad, ambientales y de licencia para el vuelo de prueba suborbital, dice la declaración.
“El perfil de la misión del vuelo 8 implica el lanzamiento del vehículo combinado Starship/Super Heavy desde Boca Chica, Texas, un regreso al sitio de lanzamiento del cohete propulsor Super Heavy para un intento de captura por parte de la torre de lanzamiento y un aterrizaje en el agua del vehículo Starship en el Océano Índico al oeste de Australia”, añadió la FAA en su declaración por la que ordena se comunique a SpaceX esta modificación de licencia para obtener información adicional.
Por su parte, SpaceX indicó que “tras completar la investigación sobre la pérdida de Starship en el inicio de su séptimo vuelo de prueba, se han realizado varios cambios operativos y de hardware para aumentar la fiabilidad de la etapa superior”.
El vuelo previsto para este lunes, según la empresa lanzadora, seguirá la misma trayectoria suborbital que las misiones anteriores y tendrá como objetivos los que no se alcanzaron en la prueba anterior, incluido el primer despliegue de carga útil de Starship y múltiples experimentos de reentrada orientados a regresar la etapa superior al sitio de lanzamiento para su captura. El vuelo también incluye el lanzamiento, el regreso y la captura del cohete Super Heavy”.