Exploradores de la Tierra, fundamentales para el programa FutureEO de la ESA, son misiones de investigación pioneras que muestran cómo nuevas técnicas de observación conducen a nuevos hallazgos científicos sobre el planeta. Gracias a Harmony, la imagen se volverá mucho más clara. Esta nueva y emocionante misión comprenderá dos satélites idénticos que orbitan la Tierra en convoy con un satélite Copernicus Sentinel-1. Cada satélite Harmony llevará un radar de apertura sintética de solo recepción y un instrumento infrarrojo térmico multivisión.
Al promover la ciencia y la tecnología, abordan cuestiones que tienen una relación directa con el cambio climático y problemas sociales como la disponibilidad de alimentos, agua, energía, recursos y salud pública.La Tierra es un sistema altamente dinámico donde el transporte y los intercambios de energía y materia están regulados por una multitud de procesos y mecanismos de retroalimentación. Desenredar estos procesos complejos para comprender mejor cómo funciona la Tierra como sistema es un gran desafío.
Al hacer avanzar la ciencia, Harmony, a su vez, también ayudará a abordar problemas sociales como los establecidos en los Grandes Desafíos del Programa Mundial de Investigación del Clima y una serie de Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Junto con las observaciones de Sentinel-1, Harmony ofrecerá una amplia gama de observaciones únicas de alta resolución del movimiento que ocurre en la superficie de la Tierra o cerca de ella.
El investigador principal de Harmony, Francisco López-Dekker, de la Universidad Tecnológica de Delft en los Países Bajos, explicó que «Harmony se utilizará, por ejemplo, para cuantificar los procesos que gobiernan el intercambio de impulso, calor y humedad entre la superficie del océano y el aire arriba. Estos intercambios influyen en los procesos de la atmósfera inferior, impulsan los patrones meteorológicos y afectan nuestro clima.
“También se utilizará para estudiar la deformación y la dinámica del flujo en los bordes de la capa de hielo que cambian rápidamente para una mejor comprensión del aumento del nivel del mar. Además, Harmony observará el movimiento de los glaciares de montaña, que son esenciales para proporcionar agua dulce a cientos de millones de personas, por lo que no se puede subestimar la importancia de comprender cómo están cambiando. Y Harmony se usará para medir pequeños cambios en la forma de la superficie terrestre, como los relacionados con terremotos y actividad volcánica, y por lo tanto contribuirá a la monitorización de riesgos”, añadió.
En los últimos cuatro años, el proyecto Harmony se ha sometido a un estricto escrutinio de viabilidad y a un proceso de predesarrollo, que culminó con la aceptación de la propuesta por parte de la Junta del Programa de Observación de la Tierra (PB-EO) de la ESA, basada también en el asesoramiento científico y la recomendación del Consejo Asesor Comité de Observación de la Tierra (ACEO).
René Forsberg, presidente interino del Comité Asesor de Observación de la Tierra de la ESA, explica que “las misiones pioneras de investigación Earth Explorer de la ESA son fundamentales para la posición de Europa como líder mundial en la observación de la Tierra. Estamos extremadamente felices de ver a Harmony unirse a esta extraordinaria familia de misiones y estamos seguros de que traerá avances significativos en nuestra comprensión del funcionamiento de nuestro frágil planeta”.
Simonetta Cheli, directora de los Programas de Observación de la Tierra de la ESA, agregó que “de hecho, los Exploradores de la Tierra son fundamentales para nuestro programa FutureEO, un programa que aprovecha ideas novedosas para desarrollar misiones y conceptos de satélites pioneros y para probar tecnologías innovadoras. Al fomentar nuevas formas imaginativas de usar la observación de la Tierra, FutureEO permite que florezca la excelencia científica para abordar los desafíos sociales del mañana. “La nueva tecnología y las técnicas de observación probadas por los Exploradores de la Tierra también son clave para desarrollar misiones ‘operativas’, como las misiones Copernicus Sentinel de Europa, que entregan datos sistemáticos para servicios ambientales. En el caso de Harmony, prevemos que su tecnología será importante para mejorar las capacidades de la misión Copernicus Sentinel-1 Next Generation”.
Con Harmony seleccionado formalmente como el décimo Earth Explorer, la misión es parte de la propuesta del programa Earth Observation FutureEO de la ESA en el próximo Consejo a nivel ministerial, CM22, donde los Estados miembros tomarán las decisiones de financiación.
Luego, el siguiente paso implicará el ajuste fino del diseño de la misión y la posterior construcción con miras al lanzamiento de los satélites en 2029.