La ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, ha asegurado que el Gobierno español «no se está planteando cerrar el tráfico aéreo» para evitar la propagación del coronavirus, lo que contradice y corrige lo dicho dos días antes por su compañero de Gobierno, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
El pasado martes, el titular del Interior, uno de los cuatro ministros designados como autoridades competentes delegadas en el real decreto por el que se declaró el estado de alarma, en declaraciones a la cadena Cope no descartaba el cierre del espacio aéreo, pero recordó que la actividad de los aeropuertos ya está reducida un 50%.
“Los aeropuertos están reducidos al mínimo, pero no descartamos cerrar el espacio aéreo», dijo Grande-Marlaska, quien señaló que la autoridad sanitaria sólo les había recomendado cerrar las fronteras terrestres, aunque también señaló que los puertos han sido prácticamente cerrados al tráfico de personas y también hay una orden de reducir vuelos.
Dos días después, en una entrevista en la cadena Ser, la jefa de la diplomacia española ha dejado claro que, “el Gobierno no se plantea cerrar el tráfico aéreo. Pero si eso estuviera en la mesa, los españoles podrían volver”.
La ministra ha explicado que son más de 2,7 millones de españoles viviendo fuera de España por lo que ha pedido que cualquiera que quiera volver por la crisis del coronavirus que llame a la embajada y al consulado y «buscarán una solución».
“Los españoles que se encuentran en el extranjero pueden estar tranquilos. Siempre pueden volver a su país«, ha añadido. En esta línea, la ministra ha recordado que el cierre del espacio aéreo tiene que ver con la «irresponsabilidad» de algunos ciudadanos que, a pesar de las recomendaciones sanitarias, «pretenden beneficiarse de los precios muy bajos» dada la situación.