El rover marciano Perseverance, de la Nasa, ha estado ocupado sirviendo como estación base de comunicaciones para el helicóptero Ingenuity y documentando los vuelos históricos de la aeronave. Pero también ha enfocado sus instrumentos científicos en las rocas que se encuentran en el suelo del cráter Jezero.
Los conocimientos que obtenga ayudarán a los científicos a crear una línea de tiempo de cuándo se formó un lago antiguo allí, cuándo se secó y cuándo comenzaron a acumularse sedimentos en el delta que se formó en el cráter hace mucho tiempo. Comprender esta línea de tiempo debería ayudar a fechar muestras de rocas, que se recolectarán más adelante en la misión, que podrían preservar un registro de microbios antiguos.
Una cámara llamada WATSON en el extremo del brazo robótico del rover ha tomado fotografías detalladas de las rocas. Un par de cámaras con zoom que componen el generador de imágenes Mastcam-Z en la “cabeza” del rover también han examinado el terreno. Y un instrumento láser llamado SuperCam ha golpeado algunas de las rocas para detectar su química. Estos instrumentos y otros permiten a los científicos aprender más sobre el cráter Jezero y ubicarse en áreas que les gustaría estudiar con mayor profundidad.
Una pregunta importante que los científicos quieren responder es si estas rocas son sedimentarias (como la arenisca) o ígneas (formadas por la actividad volcánica). Cada tipo de roca cuenta una historia diferente. Algunas rocas sedimentarias, formadas en presencia de agua a partir de rocas y fragmentos minerales como arena, limo y arcilla, son más adecuadas para preservar biofirmas o signos de vida pasada. Las rocas ígneas, por otro lado, son relojes geológicos más precisos que permiten a los científicos crear una línea de tiempo precisa de cómo se formó un área.
Un factor que complica las cosas es que las rocas alrededor de Perseverance han sido erosionadas por el viento con el tiempo y cubiertas con arena y polvo más jóvenes. En la Tierra, un geólogo podría caminar penosamente hasta el campo y abrir una muestra de roca para tener una mejor idea de sus orígenes. “Cuando miras dentro de una roca, ahí es donde ves la historia”, dijo Ken Farley de Caltech, científico del proyecto Perseverance.
Si bien Perseverance no tiene un martillo de piedra, sí tiene otras formas de mirar el polvo de más de milenios. Cuando los científicos encuentran un lugar particularmente atractivo, pueden extender el brazo del rover y usar un raspador para moler y aplanar la superficie de una roca, revelando su estructura y composición internas. Una vez que han hecho eso, el equipo recopila información química y mineralógica más detallada utilizando instrumentos de brazo llamados PIXL (Instrumento planetario para litoquímica de rayos X) y SHERLOC (Escaneo de entornos habitables con Raman y luminiscencia para productos orgánicos y químicos).
“Mientras más rocas miras, más sabes”, dijo Farley. Y cuanto más sepa el equipo, mejores muestras podrán finalmente recolectar con el taladro en el brazo del rover. Los mejores se almacenarán en tubos especiales y se depositarán en colecciones en la superficie del planeta para su eventual regreso a la Tierra.
Un objetivo clave de la misión de Perseverance en Marte es la astrobiología, incluida la búsqueda de signos de vida microbiana antigua. El rover caracterizará la geología del planeta y el clima pasado, allanará el camino para la exploración humana del Planeta Rojo y será la primera misión en recolectar y almacenar en caché roca y regolito marcianos (roca rota y polvo).
Las misiones posteriores de la Nasa, en cooperación con la ESA, enviarán naves espaciales a Marte para recolectar estas muestras selladas de la superficie y devolverlas a la Tierra para un análisis en profundidad.
La misión Perseverance de Mars2020 es parte del enfoque de exploración de la Luna a Marte de la Nasa, que incluye las misiones de Artemisa a la Luna que ayudarán a prepararse para la exploración humana del Planeta Rojo.
Felicidades por las noticias que nos vamos enterando del otro mundo