Las compañías aéreas europeas British Airways (BA) y Lufthansa suspendieron repentinamente el sábado sus vuelos a El Cairo por cuestiones de seguridad, sin dar más detalles.
BA anunció la suspensión de vuelos por siete días a la capital egipcia en una medida cautelar mientras se analizaba la situación política creada en la zona.
Por su parte, la compañía alemana se sumó a la iniciativa de la aerolínea británica cabcelando sus vuelos a El Cairo desde Munich y Francfort para evaluar la situación creada.
El Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido, en un aviso dirigido a los pasajeros con intención de volar a Egipto, señaló: «existe un mayor riesgo de terrorismo contra la aviación». También manifestó que los vuelos de Egipto hacia el reino Unido estaban bajo medidas de seguridad adicionales e instaron a los pasajeros a colaborar plenamente con los efectivos de seguridad en los aeropuertos.