Un Boeing 767 de carga de la compañía norteamericana de logística FedEx aterrizó este miércoles en el aeropuerto turco de Estambul sin que se desplegara el tren de aterrizaje delantero debido a un fallo técnico, por lo que fue arrastrándose a lo largo de la pista, según informó el ministerio turco de Transportes.
El avión, procedente del aeropuerto Charles de Gaulle de París, llegó a las proximidades del aeropuerto de Estambul cuando sus tripulantes informaron a la torre de control del problema de su tren de aterrizaje. Los equipos de emergencia y bomberos prepararon la pista para la toma de tierra.
Las redes sociales recogen el vídeo del Boeing arrastrándose por la pista dejando todo un reguero de chispas y humo por debajo del avión hasta su detención. El tráfico aéreo fue detenido temporalmente en una de las pistas tras el aterrizaje, según informaron fuente del aeropuerto, que añadieron que no hubo víctimas. Las autoridades locales han iniciado una investigación.
Se trata del último de una serie reciente de incidentes graves ocurridos en aviones Boeing iniciada a primeros del pasado mes de enero con la pérdida en vuelo de una puerta de un avión de Alaska Airlines. Otro avión perdió una rueda y recientemente ocurrió el desprendimiento de la cubierta de un motor de otro avión en Denver durante el despegue.