El lanzador ligero Vega despegó por fin del puerto espacial en la Guayana Francesa con 53 pequeños satélites, entre ellos el UPMSat-2 de la Universidad Politécnica de Madrid, en un nuevo servicio de misión de naves espaciales pequeñas (SSMS) de Arianespace, que abre nuevas oportunidades de lanzamiento para el mercado de satélites pequeños en rápido crecimiento.
Vega desplegó a sus 53 satélites pasajeros durante un vuelo de una hora y 44 minutos, que implica una secuencia de siete despliegues de carga útil desde el dispensador SSMS.
Designado Vuelo VV16 en el sistema de numeración de la familia de lanzadores de Arianespace, esta misión a la órbita sincrónica del Sol lleva 46 pequeños CubeSats y siete microsatélites de 21 clientes de 13 países. Una vez desplegada, la nave espacial servirá para varias aplicaciones, incluida la observación de la Tierra, las telecomunicaciones, la ciencia, la tecnología y la educación.
Con este vuelo, además, concluyen de manera rápida y eficiente las medidas y acciones correctivas efectuadas por la industria bajo la dirección de la ESA como Autoridad de Cualificación del Sistema de Lanzamiento de Vega, siguiendo las recomendaciones de la comisión de investigación independiente que analizó el fallo del vuelo VV15 de Vega del 10 de julio de 2019.
“Ahora que el Puerto Espacial Europeo vuelve a estar operativo, nos enorgullece que Vega vuelva a volar para probar este nuevo servicio de lanzamiento. El primer dispensador SSMS europeo ofrecerá un acceso asequible y rutinario al espacio a pequeños satélites, un nuevo concepto que muestra nuestra respuesta a las nuevas necesidades del mercado”, comenta Daniel Neuenschwander, director de Transporte Espacial de la ESA.
Se trata de un vuelo de “prueba de concepto” operado por Arianespace dentro de la iniciativa LLL (Light satellites, Low cost, Launch opportunities, o “satélites Ligeros, Bajo coste, oportunidades de Lanzamiento”) de la ESA, acordada por el Consejo de la ESA a nivel ministerial que tuvo lugar en 2016 para allanar el camino a los servicios rutinarios para satélites ligeros empleando los lanzadores europeos Vega/Vega-C y Ariane 6.
El dispensador SSMS es una estructura liviana y modular de fibra de carbono, diseñada para transportar múltiples cargas útiles ligeras al espacio, que se puede configurar muy poco antes del lanzamiento para que transporte múltiples cantidades y tamaños de satélites. Así, Vega puede ofrecer oportunidades de lanzamiento cómodas y asequibles para satélites pequeños sin los inconvenientes de viajar como carga secundaria junto a satélites mucho mayores. Una vez desplegados los satélites, el dispensador saldrá de órbita para evitar convertirse en basura espacial.
“Este lanzamiento demuestra la capacidad de la ESA de aprovechar las innovaciones para abaratar costes, ser más flexible y ágil, y avanzar hacia la comercialización”, señala el director general de la ESA, Jan Wörner. “Esta mayor capacidad de acceder al espacio para pequeños satélites innovadores tendrá numerosos efectos positivos en distintos ámbitos, desde la investigación medioambiental hasta la demostración de nuevas tecnologías”.
Los satélites pequeños ofrecen nuevas oportunidades a empresas y gobiernos de acceder al espacio con fines comerciales o de investigación, y son esenciales para la economía NewSpace.
Vega transportaba siete microsatélites con masas de 15 kilogramos a 150 kilogramos, así como 46 CubeSats para su puesta en órbitas heliosíncronas a una altitud de entre 515 y 530 kilómetros. El último satélite se liberó unos 104 minutos tras el despegue.
Alrededor de la mitad de la masa total de los 53 satélites agregados por Arianespace al lanzamiento de hoy proceden de países europeos (con representación de ocho de ellos) y la ESA ha contribuido al desarrollo de cuatro: el microsatélites ESAIL, de 113 kg, y los CubeSats Simba, Picasso y FSSCat/Φ-sat-1.
El vuelo de Vega ha sido financiado en parte por la Unión Europea dentro del programa Horizonte 2020 en el marco del acuerdo de contribución entre la ESA y la UE para actividades espaciales firmado el 16 de abril de 2019. Sirve de apoyo para la demostración y validación en vuelo de este nuevo servicio de viaje compartido, así como del servicio de lanzamiento del microsatélite UPMSat-2 de la universidad madrileña.
Vega y sus cargas útiles se han conservado en perfectas condiciones y las baterías se han recargado después de que las inclemencias meteorológicas a gran altitud por encima del Puerto Espacial Europeo interrumpieran varios intentos de lanzamiento en el mes de junio.