Arabia Saudí planea irrumpir en el tráfico aéreo internacional con una nueva aerolínea nacional, abriendo un frente en la competencia regional de los gigantes aeronáuticos del Golfo, Emirates y Qatar Airways, según informa la agencia Reuters.
El príncipe heredero, Mohammed bin Salman, que impulsa la diversificación económica para alejar a Arabia Saudita de los ingresos petroleros y crear empleos, anunció el martes una campaña de transporte y logística destinada a convertir al reino en el quinto centro de tránsito aéreo más grande.
Dos fuentes familiarizadas con la operación dijeron a Reuters que la nueva aerolínea impulsaría las rutas internacionales y se haría eco de las aerolíneas del Golfo al transportar personas de un país a otro a través de conexiones en el reino, conocidas en la industria como tráfico de sexta libertad.
La estrategia marca un cambio para Arabia Saudita, cuyas otras aerolíneas, como la estatal Saudia y su filial de bajo coste flyadeal, operan principalmente servicios domésticos y vuelos de punto a punto desde y hacia el país de 35 millones de personas.
La expansión saudí amenaza con agudizar la batalla por los pasajeros en un momento en que los viajes se han visto afectados por la pandemia de coronavirus. Se prevé que los vuelos de larga distancia como los operados por Emirates y Qatar Airways sean los que más tarden en recuperarse.
«La competencia comercial en la industria de la aviación siempre ha sido feroz, y la competencia regional se está calentando. Algunas turbulencias en las relaciones regionales están en el horizonte», dijo Robert Mogielnicki, académico residente del Instituto de los Estados Árabes del Golfo.
Dubai, el centro de viajes aéreos internacionales más grande del mundo, ha anunciado un plan de cinco años para aumentar las rutas aéreas y marítimas en un 50% y duplicar la capacidad turística durante las próximas dos décadas.
Riad ya se ha movido para competir con los Emiratos Árabes Unidos, el centro de negocios, comercio y turismo de la región. El gobierno saudí ha dicho que a partir de 2024 dejará de otorgar contratos a empresas que no establezcan sedes regionales en el reino.
El príncipe Mohammed está tratando de atraer capital extranjero para crear nuevas industrias, incluido el turismo, con la ambición de aumentar los visitantes en general a 100 millones para 2030 desde 40 millones en 2019.
«Arabia Saudita tiene la capacidad de seguir adelante con su estrategia de aviación y turismo cuando otros se retiran y se retraen», ha dicho el consultor de aviación Brendan Sobie. «Es una estrategia arriesgada, pero también sensata dada su posición y objetivo general de diversificación».
Sin embargo, cualquier aerolínea requiere un capital inicial sustancial y los expertos advierten que, si la ambición de Arabia Saudita es competir en vuelos de tránsito, es posible que tenga que lidiar con años de pérdidas.
La gran población de Arabia Saudita genera tráfico directo que podría amortiguar las pérdidas a medida que una nueva aerolínea apunta al tráfico de tránsito internacional, dijo el consultor de aviación John Strickland.