La aerolínea Air New Zealand se ha aliado con cuatro fabricantes de aviones (Eviation, Beta, VoltAero y Cranfield Aerospace) para desarrollar aeronaves de cero emisiones, ya sea de carga o de pasajeros, para 2026. Así, la aerolínea trabajará con estos cuatro fabricantes de aeronaves eléctricas, de hidrógeno verde o híbridas para desarrollar la tecnología y la infraestructura necesaria para hacer realidad el vuelo de estas aeronaves en Nueva Zelanda.
Por ello, la aerolínea ha firmado una “declaración de intención de pedidos», que demuestra su interés en adquirir inicialmente tres aviones, con opciones para 20 más, de uno o más de los socios sujetos a un proceso de evaluación. El director ejecutivo de Air New Zealand, Greg Foran, asegura que la aerolínea seleccionó a estos socios en función de la etapa en la que se encuentran en su proceso de fabricación de aeronaves y su objetivo compartido de comenzar ahora a tomar medidas ambiciosas sobre el cambio climático.
“Se trata de trabajar con una gama de líderes en tecnología de aeronaves de cero emisiones para ayudar a mover todo el ecosistema. Nuestro objetivo es confirmar nuestro compromiso con uno o más de estos socios en los próximos 12 años, con la ambición de comprar un avión que sea entregado a partir de 2026”, explica Foran.
«Los aprendizajes que obtendremos al volar un avión con tecnología de propulsión de próxima generación a partir de 2026 allanarán el camino para que nuestros socios a largo plazo entreguen un avión que pueda reemplazar nuestra flota doméstica turbohélice Q300. Hacer despegar un avión con cero emisiones para 2026 va a ser un desafío. Pero somos increíblemente ambiciosos, porque tenemos que serlo», comenta el directivo
Para comprender mejor la infraestructura requerida para volar aviones de hidrógeno verde, la aerolínea también firmó un acuerdo de alianza estratégica con Hiringa Energy, una compañía de infraestructura de reabastecimiento y suministro de hidrógeno verde con sede en Nueva Zelanda.
«Si bien la aeronave juega un papel fundamental, los socios de infraestructura son igual de importantes. A través de este acuerdo, exploraremos las futuras soluciones de suministro de hidrógeno verde para nuestras ambiciones comerciales de demostración con un enfoque en garantizar que cualquier solución que creemos para cumplir con nuestro objetivo de 2026 también se esté construyendo”, explica Foran.
Si bien la tecnología de aeronaves con cero emisiones ayudará a descarbonizar la red nacional de la aerolínea hasta 2050, el combustible de aviación sostenible (SAF) es importante a corto plazo para la flota de larga distancia. El presidente ejecutivo de Hiringa Energy, Andrew Clennett, dice que el acuerdo es clave para acelerar el desarrollo del hidrógeno como combustible sostenible y renovable de cero emisiones tanto para la aerolínea como para Nueva Zelanda.