Aerion Supersonic ha decidido construir un nuevo centro de última generación, Aerion Park, en Florida (EEUU) donde ubicará su sede central, así como un campus de investigación, diseño, construcción y mantenimiento de los aviones supersónicos de la compañía. El nuevo proyecto incluye una inversión multianual de 300 millones de dólares y se espera que genere al menos 675 empleos para 2026.
Aerion comenzará a trabajar en el nuevo campus a finales de año y anticipa que la fabricación del avión comercial AS2 comenzará en 2023. Además de los 675 nuevos empleos que Aerion creará, se espera que Aerion Park atraiga proveedores aeroespaciales clave dentro de la tecnología supersónica ecosistema para llevar negocios a Florida, creando roles adicionales para científicos, diseñadores, ingenieros y constructores de aviones.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, asegura que están dando “prioridad a la expansión del sector de la aviación y aeroespacial tan importante y con altos salarios”. En este sentido, señala que “estamos encantados de que Aerion haya seleccionado Melbourne para su nueva sede mundial y esperamos el éxito de la compañía”.
Por su parte, Tom Vice, presidente, presidente y CEO de Aerion, asegura que “después de evaluar una serie de ubicaciones potenciales para nuestro nuevo hogar, estamos entusiasmados de asociarnos con Florida y la comunidad de Melbourne para crear un futuro supersónico sostenible”.
Una pena que abandonasemos ese proyecto sin ninguna razón y sin alternativa.
En el año 2014 en Airbus Military/ Airbus DS España negociamos y firmamos un contrato por el cual colaborábamos con Aerion en el desarrollo del AS2. Inicialmente trabajaban el el programa 30 ingenieros de Getafe. En el año 2015 ese contrato fue ampliado a 60 ingenieros. Y Aerión quería seguir creciendo en años sucesivos teniendo a Airbus como socio de referencia en un desarrollo que preveía la fabricación de buena parte del avión en España, especialmente en las plantas de materiales compuestos de Airbus y sus subcontratistas.
Era un negocio más que razonable ya que Airbus cobraba de Aerión todo su trabajo, mantenía activas sus organizaciones de proyectos futuros, en una época sin aviones nuevos, conseguía aceso a la tecnología de aerodinamica supersonica laminar de Aerión y, en caso de éxito del desarrollo, aseguraba una apreciable carga de trabajo durante la produción. Pero Fernando Alonso no lo entendió así y decidió no renovar el acuerdo después de 2015, sin que hubiese programas alternativos que lo justificasen. Fue Boeing el beneficiario que ocupó rápidamente el sitio dejado por Airbus.
Recientemente he leido que Alestis ha conseguido un buen paquete de trabajo en el AS2. Parece que, afortunadamente, no todos los españoles siguieron la senda de Airbus.
Perdón Aernnova no Alestis