La Comisión Europea, conforme a las normas de la UE sobre ayudas estatales, ha autorizado el plan de Francia para pagar una ayuda de reestructuración de 119,3 millones de euros para permitir que la aerolínea Air Austral vuelva a la viabilidad; y 17,5 millones de euros en ayudas para indemnizar a la empresa por los daños sufridos como consecuencia de la pandemia de coronavirus entre el 17 de marzo y el 30 de junio de 2020.
Creada en octubre de 1990 y con sede en Reunión, Air Austral es una compañía aérea francesa que garantiza la continuidad territorial entre Reunión y otras islas vecinas en el Océano Índico (Mayotte en particular) y Francia continental. Con una flota de ocho aviones, también opera servicios a destinos en los países del Suroeste del Océano Índico y en Asia.
Tras la aprobación por la Comisión de una ayuda de salvamento en forma de préstamo de 20 millones de euros del Estado francés a Air Austral el 18 de enero de 2022, Francia notificó formalmente a la Comisión una ayuda de reestructuración por importe de 119,3 millones de euros destinada a financiar un plan de reestructuración de la aerolínea.
La Comisión ha aprobado la ayuda a la reestructuración de Air Austral junto con el plan de reestructuración de conformidad con el artículo 107 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) y las directrices sobre ayudas estatales de salvamento y reestructuración de empresas no financieras en crisis.
Según la Comisión, el plan permite garantizar la viabilidad a largo plazo de la compañía aérea y evitar así su liquidación, lo que perjudicaría considerablemente a Reunión como región ultraperiférica y asistida. Además, la financiación pública del plan de reestructuración cumple con el principio de proporcionalidad, ya que el beneficiario contribuirá a su financiación a través de fuentes de fondos propias o privadas, permite que la aerolínea vuelva a la viabilidad a largo plazo y afecta al comercio entre los Estados miembros en una medida muy limitada.
La Comisión tuvo en cuenta, en particular, las medidas destinadas a limitar las distorsiones de la competencia, a saber: la limitación del número de asientos ofrecidos por Air Austral; una limitación en el número de rutas operadas por la aerolínea; la prohibición de adquirir participaciones en otras empresas; y el establecimiento de acuerdos comerciales con otras compañías aéreas que así lo soliciten. Estas medidas seguirán aplicándose mientras dure el plan de reestructuración, que se extenderá desde enero de 2022 hasta marzo de 2025.