Volocopter, la empresa alemana con sede en Bruchsal y fabricante de aerotaxis, se declaró en quiebra el pasado jueves, cuando presentó ante un Juzgado de Karlsruhe la solicitud de apertura del procedimiento de insolvencia, según hizo púbico. El Juzgado Local de Karlsruhe inició la administración provisional de la insolvencia al día siguiente y nombró a Tobias Wahl, socio y abogado de Anchor Rechtsanwältegesellschaft mbH, como su administrador.
Volocopter es una empresa pionera en movilidad aérea urbana (UAM) que desarrolla aeronaves de despegue y aterrizaje verticales (eVTOL) seguras, silenciosas y sostenibles, y una red troncal digital que conecta aeronaves, infraestructuras y operadores, el VoloIQ. Fundada en 2011, la empresa emergente está a punto de obtener la certificación de tipo de aeronave y lanzar su eVTOL urbano, el VoloCity.
La empresa pretende entrar en el mercado en 2025 tras la exitosa certificación de VoloCity por parte de la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA). Dirk Hoke, CEO de Volocopter, asegura que “estamos por delante de nuestros pares de la industria en cuanto a nuestro progreso tecnológico, de pruebas de vuelo y de certificación. Eso nos convierte en una empresa atractiva en la que invertir mientras nos organizamos con una reestructuración interna”.
En el pasado, numerosas rondas de financiación exitosas han impulsado el desarrollo y las operaciones de la empresa. Con una de las tasas de quema de activos más bajas de la industria, Volocopter ha operado con éxito en un entorno financiero extremadamente difícil. Sin embargo, a pesar de los intensos esfuerzos recientes de recaudación de fondos, no ha sido posible encontrar una solución viable para mantener las operaciones regulares fuera de los procedimientos de insolvencia, asegura la empresa alemana.
Durante el procedimiento de insolvencia provisional, la actividad empresarial continuará con normalidad. El administrador concursal provisional ha celebrado una reunión de personal para informar a los empleados sobre la situación actual y responder a las preguntas iniciales sobre el procedimiento.
Además, Tobias Wahl ha iniciado un proceso con inversores. «La empresa necesita financiación para dar los últimos pasos hacia la entrada en el mercado. Intentaremos desarrollar un concepto de reestructuración antes de finales de febrero y ponerlo en práctica con los inversores», explica Wahl.