El Servicio Nacional de Tráfico Aéreo (NATS) de Gran Bretaña está registrando en la mañana de este lunes un problema técnico y ha aplicado restricciones de flujo de tráfico para mantener la seguridad. “Los ingenieros están trabajando para encontrar y solucionar el fallo”, añadió NATS en su web al filo del mediodía.
Media hora más tarde indicaba que «seguimos trabajando duro para resolver el problema técnico. Para aclarar, el espacio aéreo del Reino Unido no está cerrado«. E insistía asegurando que “hemos tenido que aplicar restricciones al flujo del tráfico aéreo para garantizar que podamos mantener la seguridad».
Al parecer, la compañía había registrado un fallo en toda la red de los sistemas informáticos, lo que obligó a restringir el tráfico aéreo.