Después de varios aplazamientos, un cohete Falcon 9 de SpaceX, lanzó este jueves 60 satélites de retransmisión de Internet Starlink más a órbita desde el Centro Espacial Kennedy. Se trata del cuarto lanzamiento múltiple Starlink del constructor de cohetes de California en lo que va de año.
Originalmente se esperaba que despegara a finales de enero, pero el lanzamiento se detuvo repetidamente por problemas técnicos no revelados. El pasado domingo se detuvo una vez más la cuenta atrás en el último minuto antes del despegue. Pero el cohete finalmente se lanzó este jueves desde la histórica plataforma 39 del Centro Kennedy.
El lanzamiento se produjo solo nueve horas después de que otro cohete de SpaceX, un prototipo de la etapa superior Starship de carga pesada de la compañía, llevara a cabo un vuelo de prueba en la costa de Texas, ascendiendo a una altitud de hasta unos 10 kilómetros, como estaba planeado, antes de su aterrizaje. Unos minutos después, el cohete explotó.
En cambio, la primera etapa del Falcon 9 aterrizó con éxito en la plataforma habilitada al efecto en el Océano Atlántico ocho minutos y medio después del despegue. Era el octavo vuelo de ese cohete, que había sido lanzado previamente con el satélite de comunicaciones Telesat 18 Vantage, el último lote de satélites Iridium y cinco juegos de satélites Starlink.
Con el lanzamiento de los nuevos 60 satélites de este jueves, SpaceX ha puesto en órbita 1.205 Starlinks desde que comenzaron los vuelos en mayo de 2019. “Sin los límites de la infraestructura terrestre tradicional, Starlink puede ofrecer Internet de banda ancha de alta velocidad a ubicaciones donde el acceso no ha sido fiable o no está disponible por completo. En un momento en que más personas trabajan desde casa y más estudiantes participan en el aprendizaje virtual, la conectividad a Internet es más importante que nunca. Con Starlink, podemos implementarnos rápidamente en las áreas que más lo necesitan”, señalan desde SpaceX.
En diciembre, el Distrito de Escuelas Públicas del Condado de Wise en la zona rural de Virginia, donde aproximadamente el 40% de los maestros y estudiantes no tienen acceso a Internet en casa, anunció que proporcionaría servicio Starlink a algunas familias de la zona para apoyar el aprendizaje remoto. Las unidades Starlink se desplegaron en enero y más de 40 hogares ahora están conectados a Internet de alta velocidad.