South African Airways ha informado a sus 5.146 empleados que acaba de embarcarse en un proceso de reestructuración que puede conducir a la pérdida de hasta 944 empleos.
En concreto, el director ejecutivo interino, Zuks Ramasia, ha afirmado que la aerolínea ha comenzado un proceso de consulta con todos los empleados de acuerdo con la sección 189 de la Ley de Relaciones Laborales. Aunque el proceso puede conducir a reducciones laborales, Ramasia dijo que la compañía esperaba minimizar el impacto y ofrecer apoyo a aquellos que se verían directamente afectados.
Tal y como explicó, South African Airways “ha enfrentado numerosos desafíos en los últimos años que culminaron en la grave situación actual y que incluyen desafíos de financiamiento y liquidez; incapacidad de endeudarse indefinidamente sin pagar la deuda; altos costos de intereses en préstamos; precio de combustible volátil y fluctuante; volatilidad de la moneda; ingresos insuficientes y generación de efectivo en relación con el costo operativo; flota antigua que es costosa de mantener y no tiene combustible eficiente, lo que dificulta que SAA compita en el mercado; y agresiva competencia internacional y regional para estimular los ingresos y optimizar la red”.
«Además, el balance de la compañía ha sido históricamente débil y sigue siéndolo a pesar de las recientes inyecciones de capital sustanciales del gobierno. Nuestras continuas pérdidas y nuestra dependencia de las garantías gubernamentales para pedir dinero prestado a los prestamistas han aumentado los costos de intereses que afectan el costo operativo del negocio”, ha añadido.
Por ello, Ramasia ha explicado que es necesario abordar “urgentemente” la posición actual de pérdidas que ha subsistido en los últimos años y ha aclarado que el alcance de la reestructuración abarca todas las divisiones y departamentos de SAA y excluye a las subsidiarias; SAAT, Mango Airlines y Air Chefs.