La Escuela Técnica Superior de Ingeniería Aeronáutica y del Espacio (ETSIAE) de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) celebró el pasado viernes la graduación de 396 titulados del Grado en Ingeniería Aeroespacial y de 22 del Grado en Gestión y Operaciones del Transporte Aéreo.
En Cuatro Vientos, cuna de la aviación española, el evento estuvo presidido por el rector de la UPM, Guillermo Cisneros , acompañado de la directora de la ETSIAE, Cristina Cuerno; el General de División Armando Díaz Bruguera, del Cuerpo de Ingenieros del Ejército del Aire; el vicerrector de Estudiantes y Extensión Universitaria de la UPM, Miguel Ángel Gómez Tierno; el Defensor Universitario de la UPM, Ángel Rodríguez Sevillano; el subdirector jefe de estudios de la ETSIAE; José Olarrea Busto; el subdirector de Relaciones Institucionales y Promoción de la ETSIAE, José Manuel Perales Perales; el secretario académico de la ETSIAE, Ignacio González Requena, y la directora de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), Montserrat Mestres Domenech.
Precisamente, Montserrat Mestres fue la encargada de impartir la lección magistral, “La Seguridad en la Aviación”, a los recién titulados. La directora de AESA, ingeniera aeronáutica por la UPM, explicó los orígenes de la seguridad en aviación, la creación de la OACI con la firma del Convenio de Chicago, para después exponer quién forma parte de la cadena de la seguridad en aviación desde que compramos el billete hasta que llegamos a destino, destacando la estrecha coordinación existente para poder convivir en el aire y enfrentarnos a amenazas externas (aves o ataques de ciberseguridad) y la necesidad de una aviación cada vez más sostenible.
En esa cadena de seguridad los ingenieros aeronáuticos juegan un importante papel en tres áreas: la regulación, de la que se encarga la Dirección General de Aviación Civil; la ejecución, distribuida en diferentes organizaciones (de producción y diseño, de formación, compañías aéreas, centros de mantenimiento, gestores aeroportuarios o proveedores de navegación aérea); y la supervisión, de la que se responsabiliza AESA. “De hecho, en AESA contamos con 400 funcionarios, de los que el 75% son ingenieros aeronáuticos”, aseguró su directora.
En el acto académico se entregaron diplomas a los egresados del curso 2021/22 de las dos titulaciones de grado oficiales impartidas en la ETSIAE. La IX Promoción de Graduados en Ingeniería Aeroespacial (GIA) por la UPM está compuesta por 396 titulados, un 76,26% de hombres y un 23,74% de mujeres. De total de egresados, 132 pertenecen a la especialidad de Vehículos Aeroespaciales, 75 a Propulsión Aeroespacial, 57 a Navegación y Sistemas Aeroespaciales, 43 a Aeropuertos y Transporte Aéreo, 86 a Ciencias y Tecnologías Aeroespaciales, y 3 son del curso de Adaptación a Grado.
La IV Promoción de Graduados en Gestión y Operaciones del Transporte Aéreo (GyOTA) es la más numerosa hasta la fecha, con 22 integrantes, 18 hombres y 4 mujeres, que se distribuyen por especialidad del siguiente modo: 12 de la especialidad de Gestión, 9 de Operaciones de Vuelo de Transporte Aéreo y 1 de Operaciones de Control de Tráfico Aéreo.
Colaboración universidad-empresa
Tal y como reconocía la directora de la ETSIAE, Cristina Cuerno, «la sociedad deposita en la Universidad la responsabilidad de la educación superior, pero esta no puede ejercerse en solitario, aislados, sino en el contexto de un entorno cada vez más tecnológicamente exigente que nos lleva a trabajar codo con codo con la industria, con las empresas e instituciones del sector, para las que preparamos a los mejores egresados, a los profesionales del mañana”.
Muestra de esa estrecha colaboración universidad-empresa fue la representación de la industria aeroespacial presente en el acto y los premios de empresas e instituciones del sector (GMV, Isdefe, Airbus, ITP Aero, Enaire, Aviation Partner y Gesnaer) otorgados a los mejores expedientes de ambas titulaciones, en un reconocimiento al esfuerzo y dedicación de estos estudiantes.
Del esfuerzo y de la formación recibida habló Antonio Tabanera, el alumno con el mejor expediente de la IX Promoción de GIA, que tomó la palabra en nombre de todos los titulados: “Estas becas simbolizan todo el saber que durante estos cuatro años nos han entregado en la ETSIAE, pero también están llenas de nuestro esfuerzo, trabajo y sacrificio”. Y es que esta promoción de estudiantes ha estado marcada por la pandemia (e incluso por la borrasca “Filomena”) tal y como relató Antonio en numerosas anécdotas durante su intervención. “Hemos pasado por muchas adversidades, pero esto nos ha hecho más fuertes para superarnos y ver la vida con optimismo. Ahora cada uno despegamos a los distintos destinos que hemos elegido, pero seguro que en algún momento nos volveremos a encontrar. Os deseo todo lo mejor en esta nueva etapa».
Al futuro se refirieron tanto la directora de la ETSIAE como el propio rector de la UPM, para clausurar el acto. “Habéis alcanzado un objetivo, se os abre la puerta de un futuro impresionante. El campo aeroespacial es maravilloso, retador, avanzado, siempre en cambio, buscando la excelencia. Aprovechad lo que habéis logrado en vuestro paso por la Escuela y usadlo como palanca, avanzad, creced, colaborad para que, a través de vuestro papel como profesionales en este ámbito, se logre una sociedad mejor para todos”, sostuvo Cristina Cuerno.
El rector de la UPM, Guillermo Cisneros, felicitó a los egresados con estas palabras: “Habéis sabido combinar pasión, cordura y constancia en la dosis correcta para alcanzar el primer nivel en la formación universitaria. Cuando os pregunten de dónde venís, decid con orgullo y humildad que estudiasteis en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Aeronáutica y del Espacio de la Universidad Politécnica de Madrid, pues la calidad de la formación que habéis recibido es reconocida internacionalmente».