El cohete portador ruso Soyuz-2.1a puso en órbita la nave espacial rusa de carga Progress MS-26 de Roscosmos desde el cosmódromo de Baikonur hacia la Estación Espacial Internacional (ISS) con unas tres toneladas de alimentos, combustible y suministros para la tripulación a bordo de la estación. La llegada de la Progress Ms-26 al módulo Zvezda de la ISS está prevista para el próximo sábado.
La nave de reabastecimiento alcanzó la órbita preliminar y desplegó sus paneles solares y antenas de navegación según lo planeado, en su camino para reunirse con el laboratorio en órbita y los miembros de su tripulación de la Expedición 70.
La ISS es una convergencia de ciencia, tecnología e innovación humana que permite investigaciones que no son posibles en la Tierra. Durante más de 23 años, la Nasa ha apoyado una presencia humana estadounidense continua a bordo del laboratorio orbital, a través del cual los astronautas han aprendido a vivir y trabajar en el espacio durante largos períodos de tiempo.
La estación espacial es un trampolín para el desarrollo de una economía de órbita terrestre baja y los próximos grandes avances de la Nasa en exploración, incluidas las misiones a la Luna bajo Artemisa y, en última instancia, la exploración humana de Marte.