La Nasa ha alcanzado un hito significativo en su programa de regreso a la Luna al completar la primera simulación de lanzamiento para la misión Artemisa II. Esta será la primera misión tripulada bajo el ambicioso programa Artemisa, que tiene como objetivo llevar a astronautas de regreso a la Luna y allanar el camino para futuras exploraciones espaciales.
El acontecimiento tuvo lugar el 20 de julio en el Centro de Control de Lanzamiento, ubicado en el Centro Espacial Kennedy de la agencia en Florida. El equipo de lanzamiento Artemisa de la Nasa llevó a cabo esta simulación con el objetivo de garantizar que todos los aspectos de la misión estén meticulosamente preparados y que el personal esté completamente listo para enfrentar cualquier desafío.
El viaje de cuatro astronautas alrededor de la Luna y su retorno seguro a la Tierra son prioridades cruciales para la agencia espacial, y para asegurarse de que todo esté perfectamente orquestado, se llevarán a cabo una serie de simulaciones exhaustivas. Estos simulacros, conocidos como «sims» por el equipo, no solo preparan a los miembros del equipo de lanzamiento, sino que también actualizan el software utilizado en el sistema de control de lanzamiento.
La preparación para el lanzamiento de la misión Artemisa II involucra un equipo especializado dentro del Programa de sistemas terrestres de exploración (EGS). Estos expertos se dedican a presentar al equipo de lanzamiento una amplia gama de desafíos, problemas y escenarios únicos que puedan surgir durante el proceso.
«Para el equipo de lanzamiento, cada simulación es como una pequeña historia de ciencia ficción, pero es una historia que nos ayuda a ser más exitosos en nuestros esfuerzos reales», comentó John Apfelbaum, líder de capacitación en simulación de EGS en Nasa Kennedy. «Buscamos poner al equipo de lanzamiento en situaciones que quizás no hayan considerado antes».
Dado que la cuenta regresiva del lanzamiento de Artemisa II dura casi dos días, las simulaciones se enfocan en dos partes principales: la carga del propulsor y la cuenta regresiva terminal.
La simulación más reciente se centró en la carga de hidrógeno líquido y oxígeno líquido, los dos propulsores principales que alimentan el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS). Durante esta fase crítica, los equipos deben manejar la complejidad de cargar lentamente el hidrógeno líquido a temperaturas extremadamente frías de menos 423 grados Fahrenheit y el oxígeno líquido a menos 297 grados Fahrenheit. Los desafíos comunes incluyen tratar con fugas de hidrógeno, sensores de temperatura inestables en los motores e incluso situaciones de incendio.
Por otro lado, el conteo terminal, que abarca los últimos 10 minutos previos al despegue, representa uno de los momentos más intensos y dinámicos de la cuenta regresiva. Es en este momento cuando se completan todos los preparativos finales para el despegue, y todos los sistemas del cohete y la nave espacial Orion se ponen en línea y listos para la misión.
Charlie Blackwell-Thompson, director de lanzamiento de Artemisa, subrayó la importancia de estas simulaciones: «La idea detrás de las simulaciones es tener la oportunidad de practicar en equipo una y otra vez todas las cosas diferentes que pueden suceder el día del lanzamiento».
Aunque la tripulación de Artemisa II no participó en esta primera simulación, los equipos de los centros de la Nasa se están preparando para futuras simulaciones integradas en múltiples instalaciones y equipos a medida que se acerca la fecha de lanzamiento.
En resumen, estas simulaciones son un paso crítico en la preparación de la misión Artemisa II y, en última instancia, están allanando el camino para futuras misiones lunares y la eventual presencia sostenible de la Nasa en la Luna para la ciencia y la exploración espacial.