La Agencia Espacial Europea ha firmado un contrato con la italiana Avio para incrementar la competitividad y la sostenibilidad medioambiental del sistema de lanzamiento Vega más allá de 2025. Esto supone el inicio de una nueva fase en la preparación de un nuevo vehículo de lanzamiento Vega llamado Vega-E.
Industrias y universidades de 11 países participan en la preparación de este sistema de lanzamiento y contribuirán al éxito de este cohete europeo. El contratista principal, Avio, junto con sus socios, definirán aún más el sistema de lanzamiento y sus subsistemas, así como el diseño preliminar de la plataforma de lanzamiento Vega-E y la infraestructura asociada en el puerto espacial europeo en la Guayana Francesa.
El contrato, por valor de 118,8 millones de euros, fue firmado en el establecimiento de la ESA en Frascati, Italia, por Daniel Neuenschwander, director de transporte espacial de la ESA, y Giulio Ranzo, director ejecutivo de Avio.
El objetivo de Vega-E, que hará un uso extensivo de los componentes básicos de Vega-C, es aumentar aún más la competitividad y el rendimiento de este cohete, que está previsto que tenga su primer vuelo en 2022. Esto aumentará su flexibilidad en términos de masa y volumen de carga útil y reducirá el coste del servicio de lanzamiento y el de lanzamiento por kilogramo ofertado en el mercado.
La clave para lograr estos objetivos es el uso de nuevas tecnologías para una etapa superior completamente nueva, con un nuevo motor de combustible líquido de bajo coste, aseguran desde la ESA.
Así, Neuenschwander explica que “este contrato lleva a Vega un paso más allá teniendo en su corazón el nuevo motor criogénico de oxígeno líquido-metano M10, que aumentará aún más su competitividad, rendimiento y sostenibilidad”.
Vega-E tendrá tres etapas a diferencia de Vega-C que tiene cuatro. Se derivarán dos etapas de Vega-C: el motor de cohete sólido P120C de primera etapa que proporciona el empuje en el despegue y el motor de cohete sólido Zefiro-40 de segunda etapa. La nueva tercera etapa es la etapa superior criogénica de oxígeno líquido-metano que es el núcleo de la preparación de Vega-E.
“La etapa superior de Vega-E reemplazará al motor de propulsión sólido Zefiro 9 de tercera etapa y al AVUM superior de cuarta etapa de la configuración Vega actual. Esto tendrá un efecto beneficioso sobre el rendimiento y el coste”, explicó Renato Lafranconi, director de programas de Vega en la ESA.
La etapa superior de Vega-E mejorará la flexibilidad de la misión a través de su nuevo motor de ciclo expansor M10 con capacidad de reencendido múltiple. El conjunto de la cámara de empuje impresa en 3D a escala completa del M10 pasó su primera serie de pruebas de encendido en caliente el año pasado, que también calificó nuevos métodos de fabricación eficientes.
“La reducción de emisiones y residuos de combustión hace que la introducción del motor M10 sea una mejora adicional en la sostenibilidad medioambiental que es un motor para el futuro de Vega”, añadió Adriana Sirbi, directora de preparación de Vega Evolution en la ESA.