Tras 40 años de servicio, David Joyce, vicepresidente de GE y CEO de GE Aviation, se jubila. Le sucede en el cargo John Slattery, presidente y CEO de Aviación Comercial de Embraer, que tomará posesión el próximo 13 de julio.
El presidente y CEO de GE, H. Lawrence Culp, Jr., asegura que “trabajamos duro para encontrar un digno sucesor de David. En John, hemos encontrado un líder aeroespacial probado cuya experiencia comercial internacional, perspicacia estratégica y experiencia en la industria pueden hacer que nuestra franquicia líder de aviación sea aún más fuerte. El enfoque implacable de John en la experiencia del cliente durante décadas en la industria de la aviación le ha permitido entablar relaciones profundas con muchos de los clientes, proveedores y socios de GE. Está bien preparado para satisfacer sus necesidades a medida que Aviation se ejecuta a través del entorno actual y la eventual recuperación”.
Slattery dirigió el negocio más grande de Embraer, la aviación comercial, que generalmente representa más de la mitad de los ingresos del grupo y el flujo de caja libre, así como también alrededor de 10.000 de sus 18.000 empleados.
Durante su mandato en Embraer Commercial Aviation, la base instalada de E-Jet se duplicó, el número de operadores creció en un 45%, la cartera de pedidos de la unidad aumentó en un 36% y el número de países que operan el E-Jet aumentó en un 39%.
Como director comercial y posteriormente CEO de Commercial Aviation, Slattery fue responsable del plan de negocios para el E2 a través de la triple certificación del E190-E2 en 2018, antes de lo previsto, mejor que la especificación técnica original, y por debajo del presupuesto. Anteriormente se desempeñó como vicepresidente senior de finanzas de clientes, gestión de riesgos y activos de Embraer.
“Durante mucho tiempo he considerado a GE Aviation como la franquicia de aviación líder en el mundo y me siento honrado de tomar el timón de David para liderar a este talentoso equipo. Este es un momento de cambios sin precedentes en la industria aeroespacial, pero también es una oportunidad para reimaginar el futuro del vuelo y cómo podemos servir mejor a nuestros clientes”, asegura Slattery.