La Nasa y la ESA tienen un plan a largo plazo para entregar los módulos de servicio europeos para Orion. El tercer módulo de servicio proporcionado por la ESA contribuirá a la misión Artemisa-3 programada para ser lanzada con el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) de la Nasa en 2024 y llevará a cuatro astronautas a bordo de Orion a la órbita lunar donde la nave espacial atracará en la Gateway.
Desde allí, dos de los astronautas abordarán un módulo de aterrizaje para bajar al polo sur de la Luna.
ESA ya ha suministrado el primer módulo de servicio europeo que se está conectando al módulo de tripulación de Orion este mes. El segundo módulo se está construyendo en Bremen, Alemania, para su envío el próximo año a EEUU.
El nuevo contrato tiene por objeto comenzar la construcción del tercer módulo europeo de servicio para Orion, que proporcionará todo lo que los astronautas necesitan para vivir y llegar de manera segura, incluyendo agua, electricidad, propulsión, control de temperatura y estabilidad estructural.
Ya se ha establecido un contrato para dos módulos de servicio europeos con el contratista principal de la ESA, Airbus DS en Bremen, se han iniciado las primeras fases para el tercero y actualmente se está negociando el contrato completo.
La misión Artemisa-3 incluirá el alunizaje de dos astronautas que pisarán la Luna. La primera vez visitarán nuestro satélite natural para ubicarse con áreas permanentemente iluminadas y sombras permanente, donde buscarán el antiguo hielo lunar.
«El equipo acogió con satisfacción el acuerdo con euforia», dice Philippe Deloo, de ESA, del equipo del módulo de servicio europeo. «Ya estamos orgullosos de haber desarrollado la primera nave espacial para devolver a los humanos a la Luna, pero la nave espacial verá que los humanos aterrizan en la Luna en otro nivel».
«La Nasa pretende llevar a la primera mujer a la Luna», dice Nico Dettmann, jefe de desarrollo de la ESA en Exploración humana y robótica.
«La nave espacial Orion es fundamental para la infraestructura que estamos construyendo alrededor de la Luna, incluido el ensamblaje de la Gateway y la devolución de muestras reunidas por misiones robóticas», concluyó Nico. «Nos complace continuar la fructífera cooperación de exploración internacional con la NASA, 50 años después de los primeros desembarques de Apolo».