El desarrollo del futuro caza europeo FCAS, el proyecto impulsado por los gobiernos de Francia, Alemania y España, se ve de nuevo frenado, ahora por las discrepancias entre Dassault y Airbus, dos de los tres contratistas principales.
Eric Trappier, CEO de Dassault, al presentar los resultados de su empresa el pasado viernes, criticó a Airbus por los retrasos en la firma de los contratos de la Fase 1B relacionada con I+D que llevaría a un prototipo de combate para el año 2027. “Hemos hecho todo lo posible para firmar con Airbus y estoy esperando su firma”, dijo.
El contrato de la Fase 1B ha sido preparado por la Dirección General de Armamento (DGA) francesa, la agencia gala de adquisiciones militares, “y estamos esperando que Airbus lo firme… que no es el caso en este momento”, dijo Trappier.
“Para el SCAF, del cual Dassault Aviation es el líder para el demostrador New Generation Fighter (NGF), las primeras fases del trabajo de demostración (Fase 1A) continuaron en 2021 y se completará en el primer trimestre de 2022. Los estudios de concepto técnico-operativo (Conjunto de Estudio de Diseño) continúan. El resto de la obra, la Fase 1B, no fue notificada entre las partes en ausencia de un acuerdo con Airbus Defence & Space”, indicó Trappier.
Dassault lidera la participación de la industria de Francia en el programa FCAS, mientras que Airbus representa a Alemania e Indra representa a España.
Para Trappier, las discrepancias estriban en el papel que su empresa debe tener como líder del proyecto. El programa se divide en siete pilares tecnológicos, cada uno de los cuales está dirigido por una empresa específica, con la contribución de subcontratistas. Dassault es responsable del nuevo avión de combate, mientras que Airbus lidera el diseño de drones de transporte remoto, junto con nuevas capacidades de nube y tecnologías de sigilo. Indra lidera el pilar de los sistemas de sensores, mientras que Safran está construyendo un nuevo motor a reacción para el caza.
Pues con la situación internacional al rojo vivo , la verdad es que el asunto no está para discrepar , sino más bien todo lo contrario diría yo .
La situación actual es diferente de la de los ochenta cuando se estaba gestando el EFA entre Francia, Alemania, el Reino Unido e Italia. Francia abandonó el consorcio y siguió con su Rafale. Luego se incorporó España y los cuatro socios terminaron el Eurofighter, con algún retraso respecto al francés. Hubo incluso un intento de Francia por atraer a España a su proyecto.
Hoy día, si se repitiera la salida francesa, la situación para Alemania y España sería mucho más comprometida ya que la otra alternativa europea, el Tempest, está bastante alejada y una colaboración con países no europeos es muy improbable.
Es plausible que los gobiernos presionen a las compañías, y más en las circunstancias actuales, pero las perspectivas de un desarrollo con compañías forzadas a entenderse no es muy halagüeño.
Por otro lado, planea el norteamericano F 35, al que España tendrá que arrimarse en su versión B, ya adquirido y en servicio en varios países europeos, que aun siendo de la quinta generación podría postularse como alternativa.
Todavía queda mucho trecho entre los buenos deseos de una Europa de la defensa y los intereses, o recelos, nacionales.
Muy buena visión del tema.
La versión B de despegue vertical es seguro que llegará a la Armada para dar relevo al Harrier , pero ni el A ni el C lo veo en el EdAE . Lo que vendrá a sustituir a los 72 Hornets que se compraron inicialmente , no sé que aeronave será , pero yo apostaría a que F-35 Lightning II no será . Y sino al tiempo .