La aerolínea Delta ha invertido 1.900 millones de dólares en Latam Airlines, lo que representa una participación del 20% en el total de la compañía aérea. Esta operación se financiará principalmente con deuda recién emitida y efectivo disponible.
Delta también invertirá 350 millones de dólares para apoyar el establecimiento de la asociación estratégica que permitirá prestar sus servicios en 435 destinos en todo el mundo, asegura la compañía en un comunicado.
Como parte del acuerdo, Delta adquirirá cuatro aviones A350 de Latam y asumirá el compromiso de Latam de comprar 10 aviones A350 adicionales que se entregarán a partir de 2020 hasta 2025, apoyando la transformación de la flota en curso de Delta.
“Esta asociación transformadora con Latam reunirá a nuestras marcas líderes a nivel mundial, lo que nos permitirá brindar el mejor servicio y fiabilidad para los viajeros en todo el continente americano”, dijo Ed Bastian, Director Ejecutivo de Delta.
Por su parte, Enrique Cueto Plaza, director ejecutivo de Latam, asegura que “esta alianza con Delta fortalece nuestra empresa y mejora nuestro liderazgo en América Latina al proporcionar la mejor conectividad a través de nuestras redes de rutas altamente complementarias”.
La asociación estratégica desbloqueará nuevas oportunidades de crecimiento, aprovechando la huella global de Delta y Latam y las empresas conjuntas en todo el mundo, incluida la asociación existente de Delta con Aeroméxico. Con sus redes complementarias, Delta, LATAM y sus socios podrán ofrecer acceso a una gran variedad de destinos en todo el mundo. Juntos, la asociación brindará una mayor comodidad al cliente, una experiencia de viaje más fluida y conectará mejor a los clientes con el resto del mundo.
Delta estará representado en la Junta Directiva de Latam, fortaleciendo aún más la relación. La oferta pública y la asociación estratégica están sujetas a las condiciones de cierre habituales y a todas las aprobaciones gubernamentales y regulatorias requeridas, incluida la inmunidad antimonopolio.
Delta asegura que la transacción no afectará los compromisos financieros existentes de la compañía con los accionistas, incluido el flujo de caja libre y los retornos de los accionistas. Para Latam, la transacción mejorará la generación de flujo de efectivo libre, reducirá la deuda prevista en más de 2.000 millones de dólares para 2025 y mejorará la estructura de capital de Latam, mejorando su capacidad para ejecutar su estrategia a largo plazo.