Ante los serios problemas de producción de la empresa Spirit AeroSystems, proveedor de fuselajes de Boeing y que ha estado en el centro de los fallos de calidad que afectan a los aviones 737 MAX, el fabricante norteamericano negocia la recompra, después de dos décadas, de su antigua filial.
Boeing confirmó el pasado viernes estas negociaciones en un comunicado: “Hemos estado trabajando estrechamente con Spirit AeroSystems y su dirección para fortalecer la calidad de los aviones comerciales que construimos juntos. Confirmamos que nuestra colaboración ha dado lugar a conversaciones preliminares sobre cómo hacer que Spirit AeroSystems vuelva a ser parte de Boeing”.
“Creemos que la reintegración de las operaciones de fabricación de Boeing y Spirit AeroSystems fortalecería aún más la seguridad de la aviación, mejoraría la calidad y serviría a los intereses de nuestros clientes, empleados y accionistas”, añade el fabricante aeronáutico.
“Aunque no podemos garantizar que podremos llegar a un acuerdo, estamos comprometidos a encontrar formas de seguir mejorando la seguridad y la calidad de los aviones de los que dependen millones de personas todos los días”, concluye el comunicado de Boeing.
Spirit AeroSystems Holdings, por su parte también confirmó que está en conversaciones sobre la posible adquisición de la compañía por parte de Boeing. “No se pueden dar garantías de que se celebrará un acuerdo definitivo, de que se consumará cualquier transacción, o del momento, términos o condiciones de dicha transacción”, dijo la empresa.
“El Consejo de Administración de Spirit y el equipo directivo están comprometidos a mejorar el valor para los accionistas y revisan periódicamente las oportunidades de la compañía para promover este objetivo. Spirit no tiene la intención de hacer más comentarios sobre la especulación del mercado ni revelar ningún desarrollo hasta que considere que es apropiada o requerida una mayor divulgación”, señaló la compañía.
Airbus mira a Belfast
Por otra parte, también Airbus negocia con Spirit AeroSystems la posibilidad de hacerse cargo de una planta en Belfast, Irlanda del Norte, donde Spirit fabrica alas para el A220, aunque no es probable que se llegue a un acuerdo a corto plazo. Según la agencia Reuters, un portavoz de Spirit confirmó las negociaciones contractuales en curso sobre precios con Airbus: «Seguimos en conversaciones con Airbus. Valoramos nuestra asociación con Airbus».
Spirit fabrica las alas del A220 de Airbus en su planta de Belfast y hace ya cuatro meses anunció su intención de renegociar su acuerdo con el fabricante aeronáutico europeo. Patrick Shanahan, CEO de Spirit AeroSystems, dijo que creía que ambas empresas llegarían a «un resultado razonable”.
La relación entre ambas empresas es sólida desde hace tiempo. Desde 2009, Spirit diseña y construye el mástil del avión comercial A220 de Airbus. Además del pilón, el paquete de trabajo para los modelos de avión CS100 y CS300 incluye sistemas, hardware de puntal a ala y el paquete de carenado de popa. La planta de Belfast es responsable del diseño y la fabricación de las alas compuestas avanzadas para la familia de aviones A220, incluido el montaje e integración de las alas y las superficies de control. El sitio también es responsable de la fabricación de Mid Fuselage.