Timothy Keating, vicepresidente ejecutivo de Relaciones Gubernamentales de Boeing, ha sido sustituido interinamente por el director de Estrategia, Marc Allen, según un correo electrónico dirigido a los empleados de esa división por el presidente ejecutivo de la compañía, Dave Calhoun.
En su escrito, Calhoun no dio explicaciones sobre el repentino cese de Keating ni incluyó elogio o agradecimiento por la labor del ejecutivo saliente, según los medios informativos locales. “Tengo una gran confianza en la capacidad de Marc para liderar nuestro equipo de operaciones gubernamentales de clase mundial en los muchos asuntos importantes de políticas públicas y las iniciativas de participación global en las que estamos trabajando actualmente como empresa”, escribió Calhoun.
Keating formaba parte del Comité Ejecutivo de la compañía y dirigía las relaciones de la misma con las administraciones públicas, incluidas las relaciones con los gobiernos federal, estatales y locales en EEUU. También dirigía la organización Boeing Global Engagement.
Keating, que anteriormente trabajó en la administración Clinton -de quien fue asesor y ayudante especial de la Casa Blanca para Asuntos Legislativos-, desempeñó un papel clave durante años en la gestión de la relación de Boeing con el Congreso y la Casa Blanca. Fue contratado en 2008 para aprovechar su influencia política después de que Boeing perdiera inicialmente el contrato del avión de reabastecimiento de combustible aéreo de la Fuerza Aérea con Northrop Grumman, que había propuesto un tanquero basado en un avión Airbus.
Como importante contratista de defensa de EEUU, Boeing tiene contratos militares multimillonarios y su negocio depende de una estrecha relación con el gobierno, su principal cliente individual.