Abu Dhabi.- La compañía aérea Etihad Airways negocia con Boeing cancelar o diferir la entrega de pedidos de aviones 777X por valor de miles de millones de dólares en un nuevo indicio de los problemas financieros de la aerolínea y potencialmente operar el nuevo modelo de Boeing, según supo Reuters de cuatro fuentes familiarizadas con las conversaciones.
Etihad anunció este jueves un segundo año consecutivo de pérdidas, culpando de ello a los crecientes precios de los combustibles, el coseo de su ambicioso plan de reestructuración y la pérdida de negocios debido a la desaparición de Air Berlin y a los problemas en Alitalia.
Etihad, propiedad de Abu Dhabi, ha estado revisando sus planes de flota como parte de una revisión estratégica lanzada después de unas pérdidas de casi 2.000 millones de dólares en 2016, sustituyendo a su principal ejecutivo, eliminando rutas no rentables y retirando costosas aeronaves, entre otras medidas.
La aerolínea estatal, que compite con Emirates entre otras, ha dicho este jueves que sus pérdidas se redujeron a 1.520 millones en 2017, ya que redujo los costes en un 7,3% y sus ingresos aumentaron un 1,9% por ciento hasta los 6.100 millones de dólares.
La dirección de la aerolínea cree que ya no necesita todos los 25 aviones B777X encargados y estaría dispuesto a incurrir en penalizaciones por cancelaciones en lugar de cargar con las futuras pérdidas recurrentes derivadas de la sobrecapacidad, dijeron las fuentes.
Etihad es cliente de lanzamiento del B777X: una actualización de la exitosa serie mini-jumbo de Boeing que incluye planes para el avión de dos motores más grande del mundo, el 777-9 de 406 asientos que entrará en servicio en 2020.
Cancelar o aplazar los pedidos de aviones destinados a la producción en una etapa tan temprana del nuevo y ambicioso programa podría generar problemas para Boeing al cambiar al nuevo modelo.