Un colectivo de colegiados y asociados del COIAE/AIAE ha dirigido a este diario el siguiente escrito sobre “la última oportunidad” que supone para estas corporaciones profesionales la “andadura de su nueva dirección ejecutiva tras ocho años de desprestigio y litigios judiciales después de la destitución del decano ratificada por sentencia firme".
El Colegio y la Asociación de Ingenieros Aeronáuticos celebran esta tarde en el Instituto de la Ingeniería de España su primera Junta General después de las elecciones en las que un nuevo equipo presidido por Estefanía Matesanz tomó las riendas del maltrecho Colegio.
Muchos no conocíamos a Estefanía, pero como ya dijimos en Actualidad Aeroespacial durante la campaña electoral, había que dar una oportunidad a la savia nueva para cambiar la situación de tremenda crisis en la que se encontraba el Colegio.
Una vez que el nuevo equipo ha iniciado sus trabajos, se ha encontrado con una situación muy difícil tanto económica como legal, ha tenido que hacer un apartado especial para gastos judiciales.
Estefanía y su equipo traen nuevas ideas, entre ellas una estupenda: consultar a los colegiados y sacar la experiencia de los que saben y pueden aportar algo en cada una de las ramas de la profesión.
No sabemos si se equivocarán y tendremos malas noticias en el futuro, pero la Junta de esta tarde debe ser por el bien de la profesión y del sector en general en un momento tan difícil e incierto, el inicio de un nuevo tiempo en el que se hagan cosas, se ayude a los colegiados y se vuelva a ser conocido por lo que se hace, no por las nuevas demandas judiciales que puedan producirse o por alguna corrupción que obstaculice el normal trabajo.
En la Junta de esta tarde hay un punto muy importante: Reconfirmación de los puestos, hay que hacerlo para que nadie pueda entrar de nuevo en una guerra de legalidad o no de la nueva Junta y así se pueda trabajar en nuevas ideas y proyectos y en resolver la situación caótica que vive el Colegio desde la destitución de su decano. Si no, volveremos a pararnos y a no hacer nada más que pelearnos. Puede ser la última oportunidad.
Aeronáuticos por la unidad