El ministro de Asuntos Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, ha anunciado que van a trabajar, junto a Gran Bretaña, en un proyecto nuevo para construir futuros aviones de combate. Este anuncio lo ha realizado durante una entrevista en la cadena de televisión A Haber.
De acuerdo a las declaraciones de Cavusoglu, los dos países llegaron a un acuerdo en 2017 de 133 millones de dólares para desarrollar aviones de combate turcos. El grupo Kale de Turquía ha establecido una empresa conjunta con la británica Rolls-Royce para llevar a cabo este proyecto.
Así, Kale Group poseerá el 51% de esta nueva empresa, mientras que Rolls-Royce obtiene el 49% restante. En un principio, el objetivo era desarrollar motores de avión para Turquía, inicialmente dirigidos al Proyecto Nacional de Aviones de Combate TF-X. En marzo de este año, Rolls-Royce aseguró que había reducido los esfuerzos para unirse al programa.
Kale Group es el contratista del proyecto de desarrollo de motores Turbojet, un hito en el objetivo de Turquía de producir motores de aviones domésticos.