La compañía espacial SpaceX llevó a cabo con éxito una prueba del prototipo de la nave Starship, que tiene como objetivo llevar al hombre a la Luna y a Marte. La nave Starship SN6 alcanzó el pasado jueves los 150 metros previstos, solo unas semanas después de que la SN5 completara el primer lanzamiento del prototipo de Starship.
La nave Starship SN6 despegó impulsada por el motor Raptor desde la plataforma de lanzamiento de SpaceX en Boca Chica, Texas, se mantuvo en el aire por unos momentos, y luego logró aterrizar sin problemas. Finalmente, el SN6 se envió de vuelta a las instalaciones de producción para su procesamiento posterior al salto.
Según el presidente ejecutivo de SpaceX, Elon Musk, la compañía tiene la intención de hacer varios lanzamientos de prueba antes de intentar un vuelo completo. El objetivo de Starship es transportar algún día comercialmente decenas de pasajeros al espacio. Si bien las primeras pruebas del nuevo cohete se están moviendo en la dirección correcta, Musk dijo que todavía hay muchas pruebas por hacer antes de que la compañía se sienta cómoda enviando el cohete al espacio con personas a bordo.
“Primero tenemos que hacer que la cosa funcione; entregar satélites automáticamente y hacer cientos de misiones con satélites antes de que suban personas a bordo”, ha dicho Musk, quien ha anunciado que su compañía comenzó a trabajar la semana pasada en la construcción del primer prototipo de refuerzo Super Heavy, la mitad inferior del cohete que contiene la mayoría de los motores que impulsan a Starship al espacio.
«Este es un territorio realmente desconocido», dijo Musk. “Nadie ha fabricado nunca un cohete orbital completamente reutilizable. Solo tener eso es bastante significativo«, añadió el fundador de Spacex, quien apuntó que el primer vuelo orbital de Starship podría tener lugar el próximo año.
SpaceX ha estado construyendo constantemente múltiples prototipos a la vez en las instalaciones de Boca Chica. Si bien la flota de SpaceX de cohetes Falcon 9 y Falcon Heavy son parcialmente reutilizables, el objetivo de Musk es hacer que Starship sea completamente reutilizable, imaginando un cohete que se parezca más a un avión comercial, con tiempos de respuesta cortos entre vuelos donde el único coste importante es el combustible.