Open Cosmos firmó un contrato con la Agencia Espacial Europea (ESA) para avanzar en elementos clave del concepto de la misión NanoMagSat: una constelación pionera de pequeños satélites para monitorizar el campo magnético de la Tierra y el entorno ionosférico.
El concepto de la misión NanoMagSat consiste en una pequeña constelación de satélites para monitorizar el campo magnético de la Tierra y el entorno ionosférico con una innovadora estrategia de tiempo de revisitación y combinación de instrumentos (un magnetómetro escalar / vectorial absoluto autocalibrado combinado con rastreadores de estrellas en un banco óptico, un magnetómetro vectorial de alta frecuencia, una sonda Langmuir de múltiples agujas y dos receptores GNSS de doble frecuencia para la recuperación del contenido total de electrones y ionosféricos. datos de radio-ocultación).
El concepto de misión es propuesto por un consorcio de entidades europeas. Open Cosmos es responsable de los aspectos del concepto de satélite y misión. El instituto francés de investigación tecnológica CEA-Leti se centra en supervisar la carga útil y desarrollar los magnetómetros; La Universidad de Oslo está proporcionando las sondas Langmuir; y las empresas de ingeniería españolas Comet Ingeniería y Prosix Engineering están proporcionando la pluma desplegable y el banco óptico. El IPGP de la Université Paris Cité es el líder científico de la misión.
NanoMagSat fue seleccionado como candidato Scout de la ESA para una fase inicial de consolidación de viabilidad en 2020. El objetivo de esta nueva actividad es eliminar el riesgo de todos los elementos técnicos críticos con el objetivo de proponer NanoMagSat como candidato a misión en posibles futuras convocatorias de SCOUTs. Estos elementos críticos incluyen una pluma desplegable, componentes electrónicos de los magnetómetros y sondas Langmuir, así como el desarrollo de un satélite con una firma electromagnética baja. Todo esto es clave para garantizar que la carga útil coincida con los requisitos para detectar las señales específicas y cumplir con los objetivos de la misión.
La actividad desarrollará nuevas tecnologías para ampliar los roles que los satélites pequeños pueden desempeñar en estas misiones: por ejemplo, necesita ingeniería mecánica de vanguardia para proporcionar un despliegue de brazo largo, embalaje compacto y materiales muy específicos para maximizar la limpieza magnética. Del mismo modo, todos los elementos de la plataforma de satélites pequeños también deben optimizarse para esto.
Una vez que estos elementos se eliminen, esto ayudará a Open Cosmos y al consorcio a proponer un concepto de misión con el objetivo de costar menos de 30 millones de euros y desarrollarse en un plazo de tres años, una fracción del coste que han tenido en el pasado misiones científicas complementarias tan importantes.