Los directores de Tecnología de siete de los principales fabricantes aeronáuticos del mundo han emitido una Declaración en la que se comprometen a la descarbonización de la aviación.
En esta declaración aseguran que “hace más de una década, la industria de la aviación fue el primer sector mundial en establecer objetivos ambiciosos de reducción de emisiones. Hoy, nos reunimos nuevamente para apoyar el compromiso de la industria de lograr emisiones netas de carbono cero para la aviación civil para 2050 y para resaltar la importancia de la producción, distribución y disponibilidad de combustible de aviación sostenible (SAF) calificado necesario para lograr este objetivo”.
“El desarrollo de tecnologías aeronáuticas de bajo consumo de combustible ha sido una prioridad para la industria de la aviación durante más de 50 años y sigue siendo una prioridad. Una mayor aceptación de SAF mitigaría el crecimiento proyectado en las emisiones de CO 2 de la aviación a medida que aumenta la demanda de los clientes de viajes aéreos globales”, aseguran.
“Nuestras empresas son firmes en la entrega de las soluciones técnicas necesarias para reducir las emisiones de carbono del sector del transporte aéreo a través de nuestro trabajo en tres áreas clave: Desarrollar tecnologías avanzadas de aeronaves y propulsión que permitan emisiones netas de carbono cero mientras se mantienen los estándares de seguridad y calidad de nuestra industria; implementar mejoras en las operaciones e infraestructura de aeronaves; y apoyar políticas y medidas que aceleren la disponibilidad y adopción de SAF calificados”.
“Aumentar la producción y la utilización de SAF es un paso fundamental para lograr el objetivo de cero emisiones netas de CO2 del sector del transporte aéreo para 2050. Sin embargo, la producción de SAF se estima actualmente en menos del 0,1% de la demanda mundial de combustible para aviones. Además, los precios del SAF suelen ser de dos a cinco veces más altos que el precio del combustible para aviones convencional. El suministro está aún más limitado por la competencia de combustibles renovables de otros sectores que tienen opciones alternativas de descarbonización, como el transporte de superficie y la calefacción”.
“Apoyamos las políticas e iniciativas gubernamentales que estimulan la inversión en la capacidad de producción, reducen los costos y fomentan una mayor aceptación de la industria. Esto incluye la Ley de Reducción de la Inflación de EEUU de 2022 (IRA), que proporciona un crédito fiscal de licuadora. La IRA también autoriza la financiación para apoyar tecnologías e infraestructuras avanzadas que permitan ampliar la capacidad de producción y distribución de SAF en EEUU, así como proyectos para desarrollar aeronaves de bajo consumo de combustible o reducir las emisiones de los vuelos. Las asociaciones público-privadas, como el programa FAA FAST Tech, mejorarían la adopción, las pruebas y la autorización técnica de los OEM de las nuevas rutas SAF emergentes para garantizar una inserción perfecta en la flota comercial”, comentan en la declaración.
Del mismo modo, los CTO dan la bienvenida al acuerdo político encontrado en ReFuelEU Aviation, que proporcionará una fuerte señal para el despliegue de SAF en el transporte aéreo, y esperan que la legislación se adopte lo antes posible. La UE debe implementar las políticas de apoyo industrial adecuadas, dentro de la Ley de Industria Net Zero, para acelerar la disponibilidad de SAF y queroseno sintético a escala comercial, basándose en el trabajo de la Alianza Industrial para Combustibles Renovables y Bajos en Carbono (RLCF). Además, los esfuerzos de calificación que respaldan el desarrollo de tecnologías de coprocesamiento que pueden aprovechar la infraestructura de capital existente acelerarán la disponibilidad de SAF a escala comercial.
“Las asociaciones público-privadas pueden desempeñar un papel clave en el aumento del desarrollo y uso de SAF a través de la definición y alineación de políticas, junto con incentivos financieros. Los formuladores de políticas tienen la oportunidad de acelerar estos procesos brindando un apoyo sostenido y predecible al desarrollo plurianual de tecnologías novedosas y estimulando el aumento de la capacidad. Reconociendo los desafíos técnicos asociados con la descarbonización de la aviación, es esencial una mayor política pública y apoyo financiero para acelerar la producción y distribución de SAF sobre los combustibles utilizados para el transporte de superficie. Además, se requiere una estrecha colaboración con la industria de la aviación y los proveedores de combustible en el desarrollo de la infraestructura y la inversión en la capacidad de producción de SAF para acelerar la disponibilidad en apoyo de la demanda”.
“Por último, nosotros, como CTO, estamos comprometidos a apoyar políticas que aumenten la oferta de SAF mientras aseguramos una demanda consistente y predecible a través de medidas globales armonizadas. La industria de la aviación juega un papel fundamental en la vida moderna que conecta a las personas, las economías y las naciones. Estamos unidos en la propuesta de que nuestra industria tiene un futuro próspero y más sostenible, y que podemos lograrlo mediante la implementación a corto plazo de políticas armonizadas globalizadas y duraderas en toda la industria”.