La Nasa planea llevar humanos a la Luna en 2014. Para ello, está involucrando a la comunidad universitaria para que presenten propuestas sobre nuevos instrumentos tecnológicos que estudien las regiones oscuras de la Luna.
De este modo, el BIG Idea Challenge 2020 se ha ampliado este año, con equipos de mayor tamaño y más fondos que permitirán el desarrollo de conceptos de alta fidelidad, asegura la Nasa en un comunicado.
“Todavía queda mucho que aprender sobre la Luna, particularmente en las regiones que permanecen permanentemente en la sombra cerca de las regiones polares. Para ayudar a la exploración y la ciencia en aquellas áreas que han permanecido oscuras durante miles de millones de años, el BIG Idea Challenge está encargando a las universidades el desarrollo de nuevos enfoques y tecnologías para estudiar estas regiones”, explican desde la Nasa.
Para participar, los estudiantes propondrán ideas innovadoras para una amplia variedad de conceptos, sistemas y demostraciones tecnológicas que abordarán los requisitos de capacidad tecnológica a corto plazo para apoyar los objetivos de exploración de la NASA para las regiones permanentemente en sombra cerca de los polos de la Luna. Específicamente, los equipos de estudiantes y sus asesores docentes están invitados a proponer soluciones únicas en respuesta a una de las siguientes áreas:
– Exploración de regiones permanentemente en sombra en regiones polares lunares
– Tecnologías para apoyar la utilización de recursos in situ en estas regiones
– Capacidades para explorar y operar en regiones permanentemente en sombra
“Estamos entusiasmados de poder ofrecer mayores niveles de financiación para el BIG Idea Challenge 2020 que permitirá a los equipos universitarios diseñar, construir y probar soluciones de alta fidelidad para actividades tecnológicas y de exploración en las regiones polares lunares”, dijo LaNetra Tate, ejecutiva del programa del Programa de Desarrollo de Cambio de Juegos de la NASA en la sede de la agencia en Washington.
Las propuestas de BIG Idea Challenge deben tener un concepto sólido de estrategia de operaciones, incluir opciones de energía de bajo coste y tener la capacidad de operar en la oscuridad extrema. Diseñar un concepto innovador que pueda sobrevivir en este entorno no es una tarea fácil, por lo que se recomienda encarecidamente a equipos multidisciplinarios de diferentes habilidades.
El BIG Idea Challenge está abierto a equipos de hasta 20 estudiantes de universidades afiliadas al Consorcio de Subvenciones Espaciales de su estado (o en asociación con una escuela afiliada). Se seleccionarán entre cinco y 10 equipos para recibir fondos para dar vida a sus diseños. Se espera una variedad de premios, de 50.000 dólares a 180.000 dólares, dependiendo del alcance del trabajo propuesto.
Se requerirá que los equipos finalistas seleccionados realicen pruebas y proporcionen resultados para una prueba de concepto sólida. Se alienta a los equipos a ser creativos y diseñar sus propios escenarios de prueba precisos y simulados de manera realista que demuestren estar preparados para apoyar posibles misiones lunares a corto plazo. Esto es clave, porque si alguno de los conceptos propuestos se considera viable, la Nasa podría estar interesada en incluir todo o parte de uno de estos conceptos en una futura misión.
“Los estudiantes universitarios tienen el estado de ánimo adecuado para el tipo de innovación que buscamos. El mundo está abierto para ellos, y esa es una gran situación”, dijo Erica Alston, subdirectora del Consorcio Nacional de Subvenciones Espaciales de la Nasa.