Francia aplicará una ´ecotasa` de entre 1,50 y 18 euros a los billetes de avión a partir de 2020 para casi todos los vuelos que salgan de los aeropuertos franceses, según anunciaron este martes los ministros de Transportes, Elisabeth Borne, y de Transición Ecológica y Solidaria, François de Rugy, al término de la reunión del Consejo de Defensa Ecológica..
Esta medida, que se aplicará a partir del año próximo a todas las aerolíneas -sea cual sea su nacionalidad-, prevé un impuesto ecológico de 1,50 euros para los vuelos nacionales e intraeuropeos en clase económica y de 18 euros para los vuelos extracomunitarios en clase ejecutiva, señaló Borne.
Se harán excepciones para los vuelos de conexión, los vuelos a la isla mediterránea francesa de Córcega y a los territorios franceses de ultramar.
El gobierno espera con este nuevo impuesto recaudar 182 millones de euros al año, que servirán para invertir en infraestructuras de transporte más ecológicas, sobre todo ferroviarias, indicó la ministra.
La ministra de Transportes recordó que Francia se había comprometido a avanzar a nivel europeo en gravar con una ecotasa al transporte aéreo y, aunque ha reconocido que ha habido una toma de conciencia, ha subrayado también que la «urgencia» existente les lleva a actuar.
La creación de un impuesto sobre el sector de la aviación ha sido ya defendida por Bélgica y Países Bajos ante el resto de socios comunitarios en los últimos meses. En España, la ministra de Transición Ecológica en funciones, Teresa Ribera, afirmó en marzo que es una idea «interesante», pero pidió ser «prudentes».
La Comisión Europea dijo en mayo que está evaluando las normas europeas actuales sobre fiscalidad energética, que cree «desfasadas», con el objetivo de dilucidar si hay «margen» para aprobar políticas «más favorables al medio ambiente» en el futuro, pero ha evitado confirmar si dentro de esta estrategia está examinando la posibilidad de proponer un impuesto al sector de la aviación.