Tras los celebrados éxitos del Gobierno en la cumbre de la UE y las ayudas por las consecuencias del Covid-19, diversos países europeos, como Reino Unido, Bélgica, Noruega y Francia, entre otros, han coincidido el pasado fin de semana en poner trabas a los vuelos a y desde España, como consecuencia de su percepción de la evolución de los rebrotes de coronavirus en nuestro país.
La más llamativa ha sido, sin duda, la reacción del Gobierno británico que ha exigido, de la noche a la mañana, a los viajeros que lleguen al Reino Unido desde España que se pongan en cuarentena durante 14 días.
El secretario de Asuntos Exteriores, Dominic Raab, ha defendido la «decisión rápida” del Gobierno, “que es consciente de que causará molestias a los turistas”, según reconoció, pero que “no puede pedir disculpas”, dijo.
La nueva norma se anunció el sábado por la noche después de un aumento en el número de casos en España esta semana y entró en vigor menos de seis horas después de que fuera confirmada por el gobierno.
Raab dijo que el gobierno «tomó la decisión lo más rápido que pudimos», recibiendo datos el viernes y evaluándolos el sábado por la tarde.
Muy importante también, la decisión del operador alemán Tui de suspender sus paquetes de vacaciones a España desde este lunes hasta el próximo 9 de agosto, con excepción de los Archipiélagos de Canarias y Baleares, después de que el Gobierno británico decretará la cuarentena para los viajeros procedentes de España, según confirmó el director de la compañía en Reino Unido e Irlanda, Andrew Flintham.