Euclides, la misión científica de la ESA para estudiar el cosmos, realiza sus últimos pasos. El satélite Euclid explorará el universo oscuro y, en julio próximo, será lanzado en el cohete SpaceX Falcon 9 desde Cabo Cañaveral en Florida, Estados Unidos. Permanecerá en órbita durante unos seis años, a una distancia media de 1,5 millones de kilómetros más allá de la órbita terrestre.
Euclid estudiará la expansión y evolución del Universo, para comprender cómo se formó su estructura a lo largo de la historia cósmica. Sobre la base de los datos enviados, los astrónomos podrán deducir las propiedades de la energía oscura y la materia oscura, que en conjunto constituyen el 95% del Universo, y de la gravedad, aclarando aún más su naturaleza precisa. Para ello, el conjunto de instrumentos del satélite incluirá un telescopio que cartografiará más de un tercio del espacio extragaláctico, observando miles de millones de galaxias a una distancia de hasta 10.000 millones de años luz y tomando imágenes de alta precisión en luz óptica e infrarroja cercana.
Leonardo ha realizado una importante contribución tecnológica a la misión, junto con la empresa conjunta Thales Alenia (Thales 67% y Leonardo 33%), con financiación y coordinación de la Agencia Espacial Italiana (ASI).
Para permitir la observación de galaxias tan lejanas, las plantas de la compañía en Nerviano (MI) y Campi Bisenzio (FI) han producido micropropulsores de gas frío y un Fine Guidance Sensor (FGS), el equivalente hipertecnológico y ultrapreciso de un sextante (un instrumento utilizado en la antigüedad para la navegación celeste) que puede calcular hacia dónde debe apuntar el telescopio Euclid con una precisión nunca antes alcanzada por un satélite europeo. El instrumento jugará un papel clave en el desarrollo de un mapa 3D del Universo, permitiendo que el telescopio calcule su orientación en el espacio cada dos segundos y detecte el brillo de las estrellas, incluso las más débiles, señala Leonardo.
La compañía también está suministrando los paneles fotovoltaicos que alimentarán todos los sistemas del satélite. Son tres paneles que suman un total de casi 3.000 celdas, instalados encima del escudo térmico y capaces de soportar hasta +160°, con la función de proporcionar alimentación al telescopio y protegerlo del calor.
La ESA seleccionó a Thales Alenia Space como contratista principal para construir el satélite de la misión (construido y ensamblado en la planta de Turín) y su módulo de servicio. Además de una antena de banda K de alta ganancia , un instrumento plegable y orientable para recopilar y amplificar señales satelitales construido en el sitio de Roma, Thales Alenia Space también ha suministrado el transpondedor de banda X , un dispositivo que se utiliza para recibir, amplificar y retransmitir. -transmitir señales de radio en la banda de frecuencia X.
Con sus imágenes, su mapeo de un gran número de galaxias y sus datos sobre las formas, tamaños y posiciones de miles de millones de estrellas, Euclid construirá un gran archivo de datos únicos, sin precedentes en su volumen para una misión espacial, que permitirá a los científicos examinar algunos de los aspectos más fascinantes de la física y la cosmología.