Los requisitos regulatorios adicionales o retrasos significativos en la vuelta al servicio comercial de los aviones B737 MAX podrían obligar a Boeing a cortar o suspender temporalmente la producción del avión, dijo el constructor aeronáutico norteamericano en una carta a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) a la que tuvo acceso la agencia Reuters.
En su carta a la SEC del pasado 18 de octubre y de la que se ha tenido conocimiento ahora, Boeing dice que no espera que las cancelaciones de pedidos del B737 MAX debido a la inmovilización de su avión de pasillo único más vendido tengan un impacto significativo en los ingresos o ganancias. Citó el tamaño de la cartera de pedidos del 737 y la capacidad de la administración para mitigar los posibles impactos al cambiar las fechas de entrega planificadas de los clientes.
El 737 MAX, el avión más vendido de Boeing, permanece inmovilizado en todo el mundo desde el pasado mes de marzo después de los trágicos accidentes en Indonesia y Etiopía que ocasionaron la muerte de 346 personas en un periodo de cinco meses.
La carta de Boeing fue una respuesta a las solicitudes de la SEC para aclarar sus comentarios en documentos financieros anteriores sobre la base del B737 MAX relacionada con los ingresos y la producción.
Boeing había dicho anteriormente que eran posibles demoras adicionales o un corte en la producción, ya que los reguladores de todo el mundo evalúan el 737 MAX, incluida la actualización de software propuesta por Boeing para un subsistema de control de vuelo en el centro de los accidentes y los materiales de capacitación complementarios.
Boeing dijo el mes pasado que esperaba que la Administración Federal de Aviación permitiera que los aviones regresen al servicio a mediados de diciembre, a pesar de que no esperaba que la agencia completara su revisión de los requisitos de entrenamiento revisados hasta enero.