La pandemia del coronavirus podría reducir “en el mejor de los casos” un 11% el número de pasajeros de los aeropuertos españoles en 2020. “Hay que tener en cuenta que, en su punto más álgido, China retrocedió a volúmenes de tráfico aéreo de 2001 aunque en estos momentos se ha recuperado a niveles de 2009”, asegura el autor del informe El transporte aéreo comercial en España y Latinoamérica de EAE Business School, Romà Andreu.
En 2019, España fue el octavo país más conectado del mundo con 62 millones de pasajeros en el aeropuerto de Madrid Barajas Adolfo Suárez y 52 millones en Barcelona- El Prat. El liderazgo del aeropuerto de Madrid se consolida, pero a distancia del volumen de los grandes hubs europeos que manejan entre 70 y más de 80 millones de pasajeros al año. Esto hecho puede ser una fortaleza si Madrid se convierte en una alternativa para aliviar estos saturados hubs, especialmente si conecta con su mercado natural, Latinoamérica.
Por su parte, Barcelona tiene un poco más volumen de tráfico internacional que Madrid y la mayoría de su tráfico es de operadores de bajo coste. Barcelona ostenta la posición número 10 dentro del listado de hubs low cost con más conectividad del mundo, siendo el único a nivel europeo de dicha lista. Precisamente una de las características del negocio en España es su elevada exposición a los operadores LCC que estaba 14 puntos por encima de la media europea en 2017, con 56%.
En 2018, los tres aeropuertos más importantes por detrás de Madrid y Barcelona fueron Palma de Mallorca con 29 millones de pasajeros, Málaga-Costa del Sol con 19 millones y Alicante-Elche con 14 millones. En todos ellos el operador más importante fue Ryanair según consta en los datos de agosto de 2019.
En lo que se refiere al tráfico de mercancías, España tiene volúmenes de carga pequeños comparado con los grandes hubs pero su importancia va en aumento, habiendo alcanzado en 2018 el millón de toneladas totales.