Air Canada y Lufthansa, dos de las aerolíneas más destacadas del sector, han reforzado su compromiso con la sostenibilidad y la eficiencia operativa mediante nuevos pedidos de los modelos Airbus A220 y A350. Estas incorporaciones no solo modernizarán sus respectivas flotas, sino que también marcarán un paso significativo hacia la reducción de emisiones de CO2 y el cumplimiento de los objetivos de sostenibilidad a largo plazo.
Air Canada, la aerolínea de bandera canadiense, ha reforzado su confianza en el Airbus A220-300 con un pedido en firme de cinco aviones adicionales. Este nuevo encargo, realizado en el marco del quinto aniversario desde la entrega de su primer A220, eleva a 65 el total de pedidos de la aerolínea para este modelo.
Desde su incorporación en 2020, el A220 ha permitido a Air Canada abrir nuevas rutas y mejorar la eficiencia operativa. Con capacidad para entre 100 y 150 pasajeros, el A220-300 destaca por su alcance de hasta 6.700 kilómetros y un consumo de combustible un 25% menor que sus predecesores. Además, está diseñado para operar con hasta un 50% de combustible sostenible de aviación (SAF), alineándose con los objetivos de sostenibilidad de Airbus para 2030.
El vicepresidente ejecutivo de Air Canada, John Di Bert, señaló que el A220 es clave en la estrategia de crecimiento rentable de la compañía asegurando que “este avión no solo respalda nuestras operaciones, sino que también refuerza nuestro compromiso con la industria aeroespacial canadiense”.
A finales de noviembre de 2024, la flota de Air Canada cuenta con 134 aviones Airbus, incluidos los A220-300, los A321XLR y la familia A330.
Lufthansa refuerza su modernización con cinco nuevos A350-1000
El Grupo Lufthansa ha ampliado su pedido de Airbus A350-1000 con cinco unidades adicionales, elevando a 15 el total de este modelo solicitado. Estas aeronaves, previstas para entrega entre 2028 y 2030, representan una inversión aproximada de 2.000 millones de dólares y consolidan a Lufthansa como uno de los mayores operadores del A350 a nivel mundial, con un total de 75 unidades (60 A350-900 y 15 A350-1000).
Carsten Spohr, CEO de Lufthansa, destacó el impacto de esta adquisición en los objetivos de sostenibilidad de la compañía explicando que “estamos acelerando la modernización de nuestra flota para reducir las emisiones de CO2 y ofrecer a nuestros clientes una experiencia de viaje de primera clase”.
Con una estrategia enfocada en la sostenibilidad, el Grupo Lufthansa planea reemplazar progresivamente aviones de cuatro motores, como los Boeing 747-400 y Airbus A340, con modelos bimotores más eficientes. Los nuevos A350 consumen hasta un 35% menos de combustible que sus predecesores, apoyando la meta de la compañía de reducir a la mitad sus emisiones netas de CO₂ para 2030 y alcanzar la neutralidad en carbono en 2050.
Tanto Air Canada como Lufthansa demuestran con estas adquisiciones su compromiso con la sostenibilidad y la innovación tecnológica en el sector aéreo. Ambas compañías destacan como referentes en la transición hacia flotas más eficientes y respetuosas con el medio ambiente, marcando el camino hacia una aviación más verde y responsable.