El segmento terrestre de EGNOS en Torrejón de Ardoz (España) y Ciampino (Italia) está experimentando actualmente una importante actualización para garantizar una mayor solidez e integridad de los servicios a los usuarios del Sistema de aumento basado en satélites (SBAS) de Europa.
EGNOS está presente en muchos sectores, pero es un verdadero cambio de juego en la aviación, ya que ofrece trayectorias de planeo más suaves y emisiones reducidas, entre otros. EGNOS, el Servicio Europeo de Superposición de Navegación Geoestacionaria, ha estado aumentando la señal GPS y brindando servicios a los usuarios en Europa desde junio de 2005. La provisión de servicios EGNOS está generando beneficios tangibles para numerosos segmentos de mercado, incluidos los de carreteras, ferrocarriles, marítimos, geomáticos, agricultura y en particular la aviación. A punto de celebrar su décimo aniversario de Safety of Life (SoL), el sistema está reemplazando actualmente sus cinco instalaciones centrales de procesamiento (CPF) de primera generación por otras nuevas de segunda generación.
La función de las CPF es procesar los datos recibidos de la red de más de 40 estaciones de referencia (RIMS) para elaborar correcciones de reloj y efemérides para cada satélite GPS a la vista. Los CPF generan un modelo de retrasos inducidos por la ionosfera en el área de servicio de EGNOS para compensar las perturbaciones ionosféricas de las señales de navegación, lo que garantiza la integridad de las correcciones de transmisión. Los CPF de segunda generación, desarrollados por Thales Alenia Space, se unen a la entrada en servicio de una nueva versión del sistema EGNOS «ESR-242A».
Un enfoque paso a paso
Los cambios en el segmento de tierra de EGNOS se realizaron de manera fluida sin ninguna interrupción desde el punto de vista del usuario de EGNOS y sin comprometer en ningún momento el rendimiento de EGNOS. El plan de despliegue asegura la continuidad del servicio en los dos satélites geoestacionarios, con solo unos minutos de interrupción en cada uno. Seguirá un período de prueba de dos meses antes de desmantelar el antiguo CPF, lo que permitirá una reversión en caso de necesidad.
«La actualización de CPF es un componente importante que garantizará aún más la provisión de servicio sólida e ininterrumpida a nuestro grupo diverso de usuarios que crece a diario», dice Jean-Marc Piéplu, jefe del Departamento de Servicios de EGNOS. «Felicitaciones a todos los equipos involucrados, industria, proveedor de servicios, equipos de la ESA y EUSPA», concluye Piéplu.