La Comisión Europea está logrando parar los vuelos de migrantes a la frontera entre Polonia y Bielorrusia tras la gira de Margaritis Schinas, vicepresidente comunitario y comisario para la protección del estilo de vida europeo, la pasada semana por Oriente Medio.
“Beirut es la segunda parada de una serie de visitas que estoy realizando para comprometerme con países socios que son clave para ayudar a la Unión Europea a poner fin a la instrumentalización sin escrúpulos y el uso de armas de personas por parte del régimen de Lukashenko”, dijo el vicepresidente europeo.
“Se está produciendo un cambio. Ayer estuve en Dubai donde me impresionó el compromiso de las autoridades de los Emiratos Árabes Unidos de trabajar con nosotros para poner fin a estas prácticas. Me gustaría saludar públicamente la decisión de las autoridades de Aviación Civil de Turquía que anunciaron hace un par de horas su decisión de limitar también este tipo de operaciones. Y mis interlocutores aquí en el Líbano me aseguraron que el Líbano también está dispuesto a trabajar con nosotros en ese sentido”, añadió Schinas.
Turquía fue el primer país en anunciar la prohibición a los ciudadano iraquíes, sirios y yemeníes de volar desde aeropuertos turcos hacia Minsk. Luego Irak también suspendió los vuelos directos a la capital de Bielorrusia.
El Gobierno turco, en una declaración institucional, aseguraba que “nos negamos a ser retratados como parte de un problema en el que Turquía no es parte. Además, consideramos que es intencional que una empresa prominente a nivel mundial como Turkish Airlines sea el objetivo, a pesar de que la información sobre este tema se comparte de forma transparente”.
“Turquía hace hincapié en la importancia de tomar las medidas necesarias para la lucha contra la migración irregular y la trata de personas en cada ocasión y pide a la comunidad internacional que sea responsable y sensible con este tema. Esperamos que las partes interesadas resuelvan este problema con moderación y nosotros, como Turquía, hacemos hincapié en que estamos dispuestos a brindar todo el apoyo necesario para superar este problema”.
El aeropuerto de Estambul se había convertido, en palabras del jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, en un “hub de tránsito de migrantes”. Tras la decisión turca, Irak anunció también la suspensión de sus vuelos directos hacia la capital bielorrusa para «proteger a los ciudadanos iraquíes de las redes de contrabando de personas», según la agencia INA.